La policía, alertada por un vendedor callejero en Nueva York, encontró y desactivó una bomba dentro de una camioneta en el área de negocios, tiendas y entretenimiento del centro de Manhattan, en una cálida tarde de sábado cuando el lugar se encontraba repleto de turistas y aficionados al teatro.
"Estamos tomando esto con mucha seriedad", dijo Napolitano al programa State of the Union de la cadena CNN. "Estamos tratando esto como si hubiera sido un potencial ataque terrorista", señaló.
La policía informó que aún no se tienen sospechosos y que se desconoce la motivación del fallido ataque.
Las autoridades dijeron que la bomba -a base de propano, gasolina y fuegos artificiales- podría haber causado la muerte de muchas personas.
"Esto no fue la imaginación. Esto no fue una falsa alarma".
"Esto fue algo real -para herir gente", dijo el Comisionado de Bomberos, Sal Cassano, agregando que de haber denotado, la fuerza de la bomba pudo haber derribado la fachada de un edificio.
Las autoridades de Nueva York permanecen en alerta en caso de otro ataque desde los ocurridos el 11 de septiembre del 2001, en los que aviones secuestrados se estrellaron contra las Torres Gemelas del World Trade Center, provocando su colapso y la muerte de numerosas personas.
Los talibán paquistaníes reivindicaron en un mensaje colgado en una página web islamista el atentado frustrado del sábado por la noche en Times Square, en el centro de Nueva York. "Los talibán paquistaníes proclaman su responsabilidad en el ataque de Nueva York en venganza por los dos líderes y mártires musulmanes Al Baghdadi y Al Muhajir", explica el comunicado.
Los talibán podrían referirse a Abu Ayyub al Masri, también conocido como Abu Hamza al Muhajir, líder de Al Qaeda en Irak; y a Abu Omar al Baghdadi, supuesto líder de otro grupo afín, el Estado Islámico de Irak (EII), abatidos el 18 de abril en Thar Thar, a 80 kilómetros al noroeste de Bagdad.