Ambos equipos ganan 2-0 en sus eliminatoria
Barça y Caja Laboral, a un paso de la final de la ACB: Unicaja y Madrid tratarán de dar guerra en casa
domingo 30 de mayo de 2010, 17:46h
El Caja Laboral volvió a derrotar (85-80) al Real Madrid en el segundo partido de las semifinales de la ACB en un partido que tuvo que decidirse, como en el inaugural, por pequeños detalles después de una prórroga manejada a la perfección por los baskonistas. Por su parte, el Regal FC Barcelona consiguió completar los deberes con su segunda victoria sobre Unicaja (71-58) y viajar a Málaga con un 0-2 que deja encarrilada la semifinal, que solo volverá a Barcelona si los andaluces consiguen hacer del Martín Carpena un fortín similar al Palau Blaugrana, invicto en esta competición.
El conjunto blanco comenzó liderando en el marcador de la mano de Felipe Reyes con los cinco puntos iniciales del pívot cordobés, que vuelve a demostrar ser el jugador interior más en forma del equipo madrileño.
Como en el primer partido de la serie, el marcador se iba moviendo por rachas continuas y, si el Madrid controlaba el partido en el debut de las semifinales, ahora era el Caja Laboral el que mantenía las diferencias desde el final de los primeros diez minutos.
La dupla brasileña Huertas-Splitter volvió a ser letal en la pintura y el pívot, jugador más valioso de la temporada, volvió a hacer gala de su enorme calidad para terminar la primera mitad con 8 puntos y 14 de valoración destacando en la faceta reboteadora local.
La cosa llegó a cambiar con la entrada, por sorpresa, de Sergio Llull a la pista a los cinco minutos de partido. El menorquín, ausente en la derrota del pasado viernes, saltó a la pista para comenzar a dirigir a los de Ettore Messina después de una antideportiva de un desdibujado Prigioni.
Si Llull disputaba sus primeros minutos, Ivanovic decidió dar entrada al canadiense Carl English tras recuperarse de sus problemas en las costillas. El ex de Gran Canaria sustituía a un 'enchufado' Oleson desde la línea de 6,25, repitiendo lo hecho en la primera victoria cajista.
La balanza comenzó a inclinarse para los locales en los segundos diez minutos llegando a colocarse con una distancia de once tantos (31-20) tras 12 minutos disputados. Pero esta racha volvió a verse cortada. En esta ocasión fue Sergi Vidal el que volvió a meter a los de Vistalegre en el partido con cinco puntos consecutivos que, sumados a un tiro libre de Reyes, volvieron a poner la igualdad en el marcador (31-26) para llegar 36-31 al descanso.
Segunda parte
Tras la reanudación, el pívot cordobés volvía a tirar del 'carro' madridista, pero el bosnio Mirza Teletovic volvía a poner las cosas en su sitio con dos triples consecutivos. Después de varias canastas fáciles de ambos equipos, llegó la reacción blanca respondiendo con dos tiros convertidos desde la línea de 6,25.
Así, los de Ettore Messina consiguieron dar la vuelta al 'electrónico' al termino del tercer cuarto (51-55) gracias a la magnífica dirección de Prigioni en los instantes decisivos reconvirtiendo su actuación en la primera mitad.
Como en el primer partido, todo se tendría que decidir en los últimos diez minutos, tiempo en el que tendrían que salir los jugadores importantes. El croata Tomic pecó de inocencia y fue eliminado por faltas personales a falta de seis minutos.
Además, una falta antideportiva de Splitter daba una ligera ventaja a los blancos (56-61) que tuvieron en Llull en sus mejores minutos sobre la pista mientras que Splitter mantenía a los baskonistas en el partido.
Con muchos fallos desde el triple de los dos equipos sumado al bajo porcentaje en los tiros libres, nadie conseguía despegarse hasta el punto de llegar 71-69 al último minuto de partido después de un inverosímil triple de Marcelinho Huertas sobre la bocina.
Tras el tiempo muerto solicitado, Reyes volvió a salir a escena para empatar el partido con una canasta bajo tablero que llevó a Dusko Ivanovic a solicitar un minuto para preparar las últimas jugadas.
En los últimos 45 segundos, Teletovic desperdició un ataque vital al jugarse un triple con varios segundos de posesión por delante mientras que Bullock, que tuvo el primer partido en sus manos, puso por delante a los blancos con dos tiros libres.
En los instantes finales, Brad Oleson puso la réplica con otros dos tiros de un punto y, a falta de 7 segundos, con posesión para el Real Madrid, Felipe Reyes, omnipresente en todo el partido, falló un tiro de dos para dejar todo aparcado para la prórroga.
En los cinco minutos añadidos, el Caja Laboral, con un enorme Splitter (23 puntos), hizo valer una férrea defensa y sentenciar el partido con continuos lanzamientos desde el tiro libre apoyado en el acierto de la pareja Huertas-Splitter, el gran sustento baskonista.
El Barcelona encarrila la semifinal
Los blaugrana salvaron los muebles en los cuartos pares, ya que con los 28 puntos del segundo cuarto se quitó el mal sabor de boca que dejó el primero y, en el último, se rehizo de un tercer periodo malo en defensa. Eso sí, si el jueves, en la puesta de largo de esta semifinal, fue Unicaja quien cogió primero las riendas, este sábado el Barça se puso con un 9-0 inicial gracias a tres triples consecutivos.
Sin embargo, el periodo acabó con un 12-13 para los andaluces, que estuvieron fuertes en defensa y pacientes en ataque. Un marcador corto y un juego diferente al del jueves. Los cajistas no consiguieron anotar hasta que se habían disputado casi cuatro minutos de juego, con un 2+1 de un recuperado Archibald. Blanco, que viajó desde Málaga tras recuperarse, puso con su triple la primera ventaja visitante.
Pascual, que temió por otra primera parte en la que los suyos no encontraran su habitual juego, puso a Basile y Grimau en pista para fortalecer la defensa y, junto a los norteamericanos Mickeal y Morris, correr al contraataque. Funcionó, y un parcial de 7-0 basado en la velocidad y la inspiración del capitán enseñaron el camino al 2-0 en la eliminatoria.
Tras unos minutos de incierto en ambos lados, el Barça despegó de nuevo. Pascual hizo valer la amplitud de banquillo y Vázquez, recuperando su mejor nivel, hizo daño en la pintura. Fuera de ella, Navarro y Mickeal volvieron a estar finos desde los 6,25 metros y llegaron las primeras grandes diferencias (+19) hasta poner el 40-23 al descanso. En el banco malagueño, Aíto no entendía qué les había pasado a sus hombres en pista.
Intercambio de papeles momentaneo
En la reanudación, un parcial de 0-8 inesperado en los culés propició que Unicaja se acercara en un momento al marcador y creyera de nuevo en la posibilidad de irse a Málaga con la serie empatada. De los 17 puntos de diferencia al descanso se pasó, en distintos lances, a los 6 puntos negativos para Unicaja.
Recortando jugada a jugada, los de Aíto hicieron de Barcelona y vieron la luz en casi todas las acciones. Navarro y Vázquez salieron al rescate de los suyos. Tardó, eso sí, en reaccionar el Barcelona. Con 52-46 en el electrónico, el Barça subió el ritmo y apretó los dientes hasta conseguir llegar al último cuarto con la barrera psicológica en pie (56-46) pese a la derrota parcial (16-23).
Pero, en un partido de grandes parciales como fue éste, el Barcelona se sirvió de uno para enterrar, de una vez por todas, las esperanzas blanquiverdes. Así, un 11-5 para los blaugrana puso muy difíciles las cosas para Unicaja que, sin dejar de intentarlo como ya pasó el jueves, no pudo cambiar el signo del partido. La nueva compañía aérea 'Morris Airways', en la que N'dong quiso ser accionista mayoritario, pusieron el toque de espectáculo al duelo.