¿Qué se esconde tras Carlos Alberto Ojeda Herrera?

Primera captura en 2004

Carlos Ojeda es detenido por la extinta DISIP en 2004. En aquel momento el acusado solicitó una medida de protección para su esposa y dos hijos bajo la siguiente exposición de motivos: “… Aproximadamente en el año 2004 en el Centro Comercial Plaza Mayor, Lechería, Anzoátegui, fui interceptado por funcionarios de la D. I. S. I. P. … me esposaron y me torturaron … tuve que acceder a decir que la droga que querían estaba en una oficina… exigiéndome éstos funcionarios que les entregara un millón de dólares… Luego de estos hechos me trasladé a la ciudad de Caracas … a los fines de consignar la respectiva denuncia en la Fiscalía Décimo Novena del Ministerio Público a Nivel Nacional… En fecha 02 de febrero de 2006 en la Avenida Baralt del Área Metropolitana de Caracas … fui nuevamente interceptado por dos camionetas y motos… me privaron de mi libertad durante 30 horas … En fecha 29-09-06, se me decreta la libertad bajo medidas cautelares … en Anzoátegui los vecinos del sector conforman que durante meses estuvieron acosando a mi esposa y a mis hijos … las amenazas han sido constantes … y todas ocurridas a través de vía telefónica y seguimientos …”.

Finalmente, el 7 de Octubre de 2006 el Juez de Control N°7 (de guardia) le otorga la medida y dispone a las fuerzas policiales del Estado su custodia y debida protección.

Inconsistencias

En paralelo con la solicitud anterior, el Juzgado Décimo Sexto en Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas acordaba no librar la boleta de excarcelación correspondiente a la declaratoria sin lugar de la solicitud de extradición, porque se había decretado la aprehensión judicial preventiva de libertad contra Carlos Ojeda Herrera, el 12 de julio de 2006.

Ese mismo año, al consultarle sobre la negativa del TSJ de extraditar a EEUU al presunto narcotraficante Carlos Alberto Ojeda Herrera, el embajador de Venezuela en Colombia para aquel entonces, William Brownfield, respondió: "En el último año el Gobierno venezolano ha negado la extradición de tres personas solicitadas por EEUU y EEUU ha negado, o por lo menos no ha respondido, al pedido de extradición de Venezuela de tres personas (...) Yo no tengo opinión sobre la causa, solamente digo que es evidente que hay un problema y deberíamos dialogar para resolverlo", precisó.

Las declaraciones del Ministro, Tareck El Aissami, contrastan con lo anterior, pues asegura que se trataba de un intento por valerse de preceptos constitucionales de Venezuela para evadir la extradición.

“Estos dos ciudadanos fueron detenidos con cédulas de venezolanos, con sus verdaderos nombres, pero se trata de documentos obtenidos de forma fraudulenta. Su supuesta nacionalización no está registrada en los archivos o el sistema del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime)”, dijo.

Explicó que los dos deportados intentaron usar las leyes venezolanas como salvoconducto para evadir sus crímenes, “pero nunca han dejado de dedicarse a lo que hacen: coordinar envíos de drogas y organizar rutas del narcotráfico colombiano”.

Ojeda: “Yo soy chavista”

La estatal Venezolana de Televisión (VTV) mostró imágenes del momento en que los tres detenidos eran trasladados esposados a un avión, bajo el resguardo de funcionarios fuertemente armados.

En el momento en que era embarcado en el avión, Tello Candelo y Ojeda Herrera comenzaron a vociferar algunos comentarios, pero VTV no difundió el audio.

“Esto es un secuestro, yo soy venezolano”, gritó Tello Candelo mientras era trasladado por funcionarios policiales a la aeronave, según constató una fotógrafa de AP.

Ojeda Herrera también protestó su deportación vociferando “soy venezolano” y “yo amo a (Hugo) Chávez, yo soy chavista”.

A diferencia de Rentería, quien no alzó la mirada en una actitud de aparente abatimiento, Tello y Ojeda lanzaron gritos al ministro mientras eran trasladados a la aeronave de la DEA.

El abogado de Ojeda Herrera, José Díaz, denunció que su defendido es ciudadano venezolano y mostró la sentencia 322 del Tribunal Superior de Justicia que declaró sin lugar la extraditación solicitada por Estados Unidos.

Díaz responsabilizó a la Fiscal 86 del área metropolitana de Caracas de no permitir la legítima defensa de Ojeda.

Ya Carlos Ojeda se encuentra en suelo estadounidense, sólo resta saber si con estos antecedentes, los abogados defensores pudieran revertir la extradición.