Los mineros de Chile ven la luz, empieza la 'operación salida'

Los trabajadores han iniciado ya la preparación física y psicológica final para su rescate que comienza en torno las 24.00 horas de esta noche (hora local, 6.00 hora española). De hecho, según el ministro de Minería, Laurence Golborne, el rescate se podría adelantar hacia las 20:00 horas de este martes (1.00 hora española).

A esa hora, se haría la última prueba de la cápsula "Fénix", que evacuará a los 33 mineros, que hará un descenso y ascenso sin ocupantes. En la citada cápsula metálica de 2,5 metros descenderá el primero de los rescatadores, un policía con conocimientos de enfermería.

Las autoridades sanitarias chilenas ya tienen preparado el dispositivo médico para atender a los mineros que han vivido más de dos meses sepultados a 700 metros de profundidad. El ministro de Salud, Jaime Mañalich, ha acudido al hospital de la ciudad de Copiapó, al que serán trasladados en helicópteros de la Fuerza Aérea los trabajadores tras ser sacados a la superficie en el campamento Esperanza.

Los helicópteros militares han ensayado en las últimas horas el recorrido que harán hasta el Hospital de Copiapó, desde la derrumbada mina San José en el desierto de Atacama.

Copiapó está a 45 kilómetros de la mina y, curiosamente, el hospital local se llama "San José", el mismo nombre que el yacimiento en el que ha transcurrido el drama desde hace 66 días.

'Atendidos como reyes'

Según explicó, cada helicóptero puede traer a cuatro mineros sentados o a dos en camilla y, al llegar al hospital, cada minero recibirá un pijama que en el pecho tiene estampada una estrella con el número 33.

De ese modo, prosiguió el ministro, los mineros se van a sentir "atendidos como reyes y van a poder, esperamos, con estos pequeños gestos superar el difícil periodo que han vivido".

También reveló que un equipo de tres psicólogos ha estado hablando con los trabajadores para definir sus estados emocionales, lo que será "un antecedente más" para definir el orden en el que subirán a la superficie.

Hoy mismo se les entregará la lista de los cuatro primeros evacuados, que son los considerados más hábiles y con capacidad para afrontar alguna eventualidad, así como los nombres de los diez siguientes, que son los evaluados como más débiles.

Los 19 restantes están considerados como los más fuertes del grupo y saldrán a continuación de los primeros. Hasta ahora, sólo se ha anunciado que el último evacuado será el jefe de turno, Luis Urzúa, de 54 años, que lideró el grupo durante el encierro.

Los mineros iniciaron este lunes una dieta especial, que contiene más sal, con el fin de que tomen más agua y así su volumen circulatorio se encuentre "más expandido". El ministro precisó que la dieta consiste en lácteos contenidos en cajas de 350 centímetros cúbicos, con contenido en glucosa, proteínas y minerales.

Los médicos que los atenderán están desde el lunes en sus puestos y los psicólogos que participan en el operativo les entregaron el último apoyo. "Están preparados mentalmente incluso para que falle el rescate, el que finalmente será un nuevo nacimiento para ellos", aseguró el psicólogo Alberto Iturra, quien habla a diario con los trabajadores.

Desde las profundidades, en un ambiente oscuro, húmedo y caluroso, los mineros revelaron los últimos días su estado de ansiedad, seguida segundo a segundo por 1.600 corresponsales de medios de comunicación.

Nervios a flor de piel

"Todavía no estoy nervioso. Yo creo que cuando me toque a mí (subir a la cápsula de salida), los nervios me van a atacar", explicó en su última carta Jimmy Sánchez, padre de una niña de cinco meses.

"He sufrido mucho y no quiero sufrir más", agregó el joven de 19 años, a quien en su poblado, un barrio marginal, preparan una fiesta con 500 invitados.

Las familias, que viven en carpas en el improvisado Campamento Esperanza, no tienen dudas sobre el éxito de la operación y preparan planes para el futuro. "La tierra va a parir 33 hijos", repiten.

Los hijos y nietos de los mineros, a quienes el Gobierno instaló incluso una escuela en el lugar, juegan risueños acompañados de payasos que llegaron espontáneamente a la mina, como Rolly proveniente de Iquique, a 1.000 kilómetros al norte.

Los mineros, que podrán ver su rescate por televisión, pidieron a los medios de comunicación que los dejen tranquilos hasta que puedan hablar con más calma, tras reunirse con sus seres queridos.

El Gobierno de Sebastián Piñera, quien llegará hoy al yacimiento, manifestó que los ensayos de rescate funcionaron sin problemas y que la seguridad de la operación está asegurada.

A partir de madrugada, uno a uno los hombres del yacimiento San José comenzarán a cerrar uno de los capítulos más insólitos de su vida.