La visita del Papa

    El Papa Benedicto XVI abandonó ayer Barcelona, tras una visita de apenas dos días a Santiago de Compostela y a la Ciudad Condal, con el deseo o la súplica o la esperanza de que “los españoles sean una sola familia”. Falta nos hace entendernos mejor y con mayor profundidad, querernos más a fin de cuentas.

     Pero lo cierto es que la visita del Papa a España, peregrino en Compostela y Barcelona, ha tenido una gran transcendencia, y no sólo en el plano espiritual. Benedicto XVI es uno de los grandes líderes del mundo, y su presencia siempre tiene un “plus” de difusión de la imagen de los lugares que visita. Y, en esta ocasión, tanto la tumba del apóstol, en Santiago, como esa maravilla del arte de Gaudí que es la basílica barcelonesa de la Sagrada Familia, se convirtieron en dos escenarios dados a conocer al mundo entero, en unos actos seguidos por decenas de millones de telespectadores, por la radio, por la prensa, por los portales de “Internet”.

     Debatir sobre el “precio” del viaje del Papa a España y considerarlo un dispendio en tiempos de crisis implica una visión muy limitada de lo que es e mundo global y de lo que son las inversiones en imagen, por fijarnos en el aspecto material que tanto obsesiona a algunos.

     Cualquier país, salvo contadísimas excepciones, y aún no siendo de mayoría católica, celebraría como una buena noticia una visita del Papa, y España no tiene por qué ser diferente.

    Otro de los aspectos de la visita fue su carácter pastoral y doctrinal, con discursos y homilías del Pontífice en los que subrayaba los valores que defiende la civilización cristiana: contra el laicismo, contra el aborto, a favor de la vida, a favor de la familia… ¿A alguien pueden sorprender estas ideas, expresadas por Benedicto XVI? El Papa es la máxima figura de una Iglesia que tiene una concepción propia de la realidad del mundo, que expone su mensaje, que defiende sus planteamientos, y que a nadie obliga a seguirlos.

    En fin, que en España ha quedado, de la visita del Papa, un mensaje para que nos llevemos mejor en estos difíciles momentos de pobreza y de egoísmo; y también la visita sirvió para difundir en el mundo el patrimonio histórico y artístico que va desde el cincel del maestro Mateo en el Obradoiro... hasta la piedra hecha vuelo y hecha luz por el genio de Antonio Gaudí.


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