El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, y los ex presidentes andaluces Manuel Chaves, actual vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, y José Rodríguez de la Borbolla han coincidido en el acto de imposición de la Cruz de Honor de la Orden de San Raimundo de Peñafort a Francisco del Río, director del Gabinete Jurídico de la Junta, del que han destacado su papel fundamental tanto en la historia de la autonomía andaluza como en la construcción de la administración autonómica.
Del Río (Córdoba, 1944) se ha mostrado muy agradecido por esta distinción, que otorga el Ministerio de Justicia, apuntando que su trabajo en la Junta de Andalucía le ha permitido desarrollar una asesoría jurídica que intuía posible y que hoy es una realidad.
Ha reconocido que se siente una persona "afortunada profesionalmente" porque ha dedicado su vida a los que más le gusta, el derecho, llegando a participar incluso en su creación, con "más o menos acierto", a través de la redacción de numerosas normas. Ha puesto de relieve que ha vivido con algún protagonismo un momento histórico de Andalucía, como fue la creación de una administración pública que presta servicio a ocho millones de personas, además de la creación del Consejo Consultivo y del cuerpo de letrados de la Junta.
Para Del Río, Andalucía puede tener defectos, pero es una tierra con grandes potencialidades y para desarrollarse necesita ilusión y autoestima. A su juicio, aquellos que se dedican a resaltar las carencias de esta comunidad no tienen interés en su progreso.
Por su parte, José Antonio Griñán ha destacado en su discurso la trayectoria profesional de "lealtad, dedicación y honestidad" de Francisco del Río, a quien ha agradecido su "contribución esencial y los servicios prestados a la administración a lo largo de los últimos 30 años". "No exagero si digo que este cordobés es una persona clave para Andalucía", ha apuntando el jefe del Ejecutivo, para quien Del Río es, sin duda, "uno de los grandes activos de la Junta de Andalucía".
"Una persona con gran peso y profesionalidad, cuya inteligencia privilegiada y una capacidad enorme de trabajo le han permitido construir buena parte del entramado institucional de nuestra comunidad", según Griñán, quien ha apuntando que la hoja de servicios de Francisco del Río está llena de hitos jurídicos fundamentales que "nos han conducido a consolidar la estructura de la Junta de Andalucía y a atender mejor a los ciudadanos".
Asimismo, José Antonio Griñán ha agradecido a Del Río que, en un momento en que se alzan voces "críticas" contra el Estado de las Autonomías, haya asumido como un compromiso personal e institucional representar a Andalucía en la Conferencia de los gobiernos de las comunidades autónomas y trabajar por la consolidación de nuestro modelo de descentralización.
LA JUNTA "NO SE ENTIENDE" SIN DEL RÍO
Manuel Chaves se ha mostrado convencido de que la Junta de Andalucía "no se entiende" sin Francisco del Río, a quien ha definido como un "amigo". A su juicio, el funcionamiento de la Junta, su día a día, con "muchos más aciertos que errores, no se entiende" sin Francisco del Río.
Su trabajo, según ha expresado, ha tenido efectos para el conjunto de la sociedad y ha dado un "nivel de excelencia" a la función pública. Del Río, según Chaves, le ha dado varios consejos que le han servido a la hora de tomar decisiones y para crear sus opiniones.
Para José Rodríguez de la Borbolla, Francisco del Río ha sido un "pilar fundamental" en la construcción de la autonomía andaluza, así como en la fundación y el desarrollo de la Junta. "Me ayudó a aprender a pensar en las aulas de la facultad; me ayudó a argumentar, y ayudó a la Junta a servirse de buenos argumentos", ha dicho de Del Río, a quien ha definido como una "persona sólida y de fiar".
Francisco del Río, licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla, es abogado del Estado desde 1973 y jefe del Gabinete Jurídico de la Junta de Andalucía desde 1982. Ha ostentado cargos como consejero secretario de la Empresa Hiladuras y Tejidos Andaluces, SA (1980-1990), consejero de la Empresa Pública Sociedad de Promoción y Reconversión Económica de Andalucía, SA (1983-1987), miembro del Consejo Rector del Instituto de Desarrollo de Andalucía (desde 1987), miembro de la Comisión General de Viceconsejeros de la Junta de Andalucía (desde 1988), consejero de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (1991-1995), vocal de la Comisión de Urbanismo de Andalucía (1983-1994), vocal de la Comisión de Ordenación del Territorio de Andalucía (desde 1994), consejero de la Empresa Pública de Puertos de Andalucía (desde 1992), consejero del Consejo Consultivo de Andalucía (desde 1994), o vocal del Consejo Andaluz del Patrimonio Histórico (desde 1998).
A ello se une su participación en tribunales de oposiciones y su labor docente en el ámbito universitario.