sábado 12 de febrero de 2011, 20:04h
La ex consejera, ex delegada del Gobierno y tertuliana, Amparo Rubiales encontró bastantes dificultades para acreditarse en la Convención. Tras dar vueltas y más vueltas por los mostradores con las iniciales de los apellidos y hacer cola en la "R", alguien le comunicó que los miembros de la Ejecutiva tenían un mostrador especial para acreditarse. Y es que lo de los lugares especiales era algo común. Varios concejales de una localidad cercana a Sevilla preguntaban por dónde caía la "entrada VIP" ya que ellos tenían, al parecer, un tratamiento especial. Alguien de la organización les bajó del guindo y tuvieron que acceder al recinto por la puerta por la que entraban todos, incluídos los ministros. Entre la prensa también hubo bastante desconcierto. Se nos prohibió el acceso a la sala de plenos y nos recluyeron en el recinto de medios de comunicación donde había diversas pantallas de TV para seguir el acto. Ante las protestas de varios, los vigilantes jurado que custodiaban las puertas del recinto hicieron la vista gorda y, finalmente, pudimos entrar al plenario sin más problemas.