El futbol no tiene dinero
miércoles 13 de abril de 2011, 16:53h
En Colombia existen 36 equipos profesionales de fútbol, de los cuales la mayoría sufre de problemas económicos. Al término de 2010, tan solo en la primera división, doce de las dieciocho selecciones presentan obligaciones laborales pendientes por un monto aproximado a los 17,5 millones de dólares, según datos proporcionados por el Instituto Colombiano de Deportes (Coldeportes).
El América, que ha conquistado trece títulos de la Liga en Colombia, es el equipo que más debe por concepto de seguridad social, impuestos y obligaciones laborales, llegando a adeudar alrededor de 10,2 millones de dólares. Le sigue el Cúcuta Deportivo con dos millones de dólares; y el Once Caldas, actual líder, con un monto casi similar.
Los equipos que están a paz y salvo con jugadores y autoridades son Atlético Nacional, Millonarios, Deportes Tolima, La Equidad y Boyacá Chicó; mientras que los directivos del Independiente Santa Fe, han solicitado una prórroga para presentar sus estados financieros.
Millonarios, que también ha conquistado trece títulos locales y es con el América la pareja más victoriosa, se transformó recientemente en sociedad anónima con el ingreso de socios que aportaron el equivalente aproximado en pesos a cuatro millones de dólares.
“Una legislación obsoleta”
Ramón Jesurún, presidente de la División Mayor del Fútbol Profesional Colombiano (Dimayor), aseguró que "el fútbol colombiano tiene problemas económicos derivados primordialmente de una legislación obsoleta…que les impide crecer a los equipos como sociedades anónimas pues, para tener liquidez, se necesitan recursos y en la actualidad hay trabas para recibir inversionistas tanto nacionales como extranjeros".
El presidente de la entidad que rige el fútbol profesional en Colombia aseguró confiar en que la nueva legislación que se abre paso en el Congreso legislativo pueda ayudar a corregir la situación, aunque matizó que no será "una solución definitiva".
La nueva ley da seis meses de plazo a los 36 equipos profesionales para convertirse en sociedades anónimas a través de la venta de acciones, establece duras sanciones como la retirada del reconocimiento legal a las entidades que incumplan sus pagos y promete cárcel para los fanáticos violentos.
"Seguramente no es la solución definitiva, pero sí es una herramienta muy importante para iniciar un nuevo proceso", manifestó Jesurún.