Boliden, quien contamina ¿paga?

Dice el aforismo que "quien contamina, paga", pero en el caso de la empresa minera Boliden parece que sólo es un dicho. El lunes se cumplieron trece años del desastre minero de Aznalcóllar que contaminó miles de hectáreas en los alrededores de Doñana. La rotura de una balsa de la mina de Boliden Apirsa el 25 de abril de 1998 provocó el vertido de seis millones de metros cúbicos de aguas ácidas y lodos contaminados en las cuencas de los ríos Agrio y Guadiamar. La mayoría de los proyectos para descontaminar y recuperar la zona, en los que participaron las consejerías de Empleo y Desarrollo Tecnológico, Agricultura y Pesca, Salud y Medio Ambiente, se desarrollaron a lo largo de un tramo fluvial de 4.634 hectáreas de extensión y 62 kilómetros de longitud entre la mina y los límites del Parque Nacional de Doñana. La Junta de Andalucía  se gastó casi noventa millones de euros en rehabilitar toda la zona afectada, de ellos, 47 le corresponden a la Consejería de Agricultura, más de 25 a la Consejería de Medio Ambiente, y más de dos a la Consejería de Salud. Pese a que la sentencia condenó a la empresa a pagar los costes derivados de la contaminación por la rotura de la balsa, la Administración andaluza sigue sin ver un euro y parece que va a seguir así bastante tiempo más. La cantidad a abonar por el Grupo Boliden asciende a 89.867.545,56 euros. Este sería el coste total de la regeneración reclamada, aunque hay que añadir que la Junta de Andalucía adquirió la titularidad de las tierras y decidió convertir ese espacio en un Corredor Verde, acciones que han supuesto un coste adicional hasta alcanzar los 142 millones de euros. El consejero de Medio Ambiente de la Junta, Juan José Díaz Trillo, dice que "En Andalucía, como en Europa, el que contamina paga" y considera "lamentable" que Boliden no haya pagado aún. Yo diría mucho más. La deuda de Boliden con los andaluces es un robo a mano armada en el que la Unión Europea debería tomar cartas para evitar que sus miembros volvieran a verse estafados por algunas empresas irresponsables. Pero, claro, ya hemos visto con el asunto de la PAC el "peso" que tiene España y Andalucía en Europa. Pues con lo de Boliden, otro tanto de lo mismo.