www.diariocritico.com
De Bambi a ZP

De Bambi a ZP

jueves 04 de octubre de 2007, 14:22h
Es como la teoría de la evolución, pero de forma catódica. Zapatero ha dado doctrina marujeada en los marujeos matinales de Tele 5. Es lo que tiene la tiranía de las encuestas: si subes, te callas; si bajas, hablas con cariño, das besos a los niños aunque éstos lloren, acaricias a los perros y hasta marujeas si te lo ponen a punta de caramelo y en un ambiente algo así como ‘canciones de amor en Lolita’s Club’.

En la cadena amiga de Tele 5, Zapatero ha pasado durante más de sesenta minutos de ‘Bambi’ a ‘Zapateritos’ y de éste a ‘Presidente por accidente’, los tres motes_ácido_bromísticos fundamentales con los que le han obsequiado en los últimos años. Y es que Zapatero ha roto moldes -como ‘paladín de las damas’ que le llamó alguna entradita en años- en el ‘Programa Rosa’ de Ana Rosa Quintana. ¿Audiencia?, la ya conocida de mayoritariamente féminas. ¿Qué ocurre, que se han vuelto abstencionistas?

Sesenta minutos de televisión dan para mucho, o para poco, dependiendo del bon faire del actuante, en este caso, presidente del Gobierno, además. Traje oscuro, corbata típica a rayas, buen porte, guapito de cara y todo sonrisas. Vamos, el yerno ideal para mamás con hijas casaderas venidas a más. En definitiva, que un escenario acaramelado, teñido casi de terciopelo gris, con una Ana Rosa almibarada y gafas a lo retro_años_cincuenta, en un ambiente global próximo al ‘niñas al salón’, le pegaban a Zapatero como a un Cristo dos pistolas. Pero todo sea por el electorado.

Ha estado simpático Zapatero. De los motes que le han puesto y que la Quintana llevaba en el guión, le gusta el de “Bambi”, porque acaba bien; no se pronuncia sobre el de “Zapateritos”, que tampoco es muy ingenioso, y le duele en el alma el de “Presidente por accidente” –film dirigido en 1988 por Paul Mazursky y protagonizada por Richard Dreyfuss y Sonia Braga- que le puso con muy mala fe el prestigioso The Wall Street Journal el 25 de noviembre de 2004. Era cruel, cierto, por sus dobles –y hasta triples- connotaciones... e intenciones. Aún hoy Zapatero respira por la herida. Y lleva razón. Sin más comentarios.

Ha salido bien Zapatero. Ha sido simpático y casi bromista –ya no le podrán llamar “Sosomán”, otro de sus motes-; ha sido optimista –para los que aún le llaman… toco madera-; ha sido madurito para las maduritas y jovencito para las jovencitas; ha sido cínico, como conviene en política –“si se retirara [de la política] el señor Rajoy yo también tendría un buen disgusto”-; ha sido tranquilo, incluso cuando ha llamado subliminalmente embustero a Ibarretxe -quien había confirmado que mantuvo una entrevista con Zapatero en agosto y el presidente lo negó-, y no se ha mojado en nada, pero es que tampoco nadie le apretaba las clavijas.

No ha dicho nada nuevo Zapatero. Ha hablado de pensiones y subidas, de paro y de bajadas; ha reprometido la España feliz en la que él vive y donde un café cuesta 80 céntimos; le ha dicho a Ibarretxe sin decírselo que no habrá referéndum; ha demostrado que las dos tardes de Economía que le dio Jordi Sevilla le han servido para algo, y se ha ganado ‘suspiros de España’ con su “en lo general, soy buena gente”. Vamos, un algo así como SanZapaterodelaCruz.

Necesitaba empuje Zapatero. Moncloa quería salir este jueves con grandes titulares –de ahí las convulsiones_periodísticas con el (no)acuerdo sobre la ley de memoria histórica- y luego arrasar en el electorado esencialmente femenino con la programa de Ana Rosa. Misión cumplida. Pero acaso hayamos sido unos privilegiados al poder observar cuáles son los límites al crecimiento.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios