El suplemento

Los periódicos deberían tener todos los días un suplemento aparte dedicado a los chorizos. En él sólo habría información sobre los corruptos, imputados, reos de la sospecha o gente misteriosa que huele a mierda pero nadie ha podido demostrar su esencia odorífera. Y así como los suplementos de economía son de color salmón, o los del corazón o bragueta de color rosa, éste sería de color mierda, incluso con extrañas rugosidades que le diese el inminente sentido de servir para la limpieza del ano. Y por supuesto este suplemento debería contener diversos ranking o estadísticas. Me refiero a los datos de una especie de liga de la corrupción en la que apareciesen las alineaciones de los más corruptos. También una valoración semanal de periodistas expertos en el hedor que estos malandantes producen.

Hasta podría realizarse una valoración económica de los más presuntos de sí mismo, creando incluso un premio Pichichi para el que más trinque en términos cuantitativos y cualitativos. En esta segunda acepción me refiero a un hedor más intenso, al imperio de la picaresca más deshumanizada, como por ejemplo cuando Roldán birlaba los dineros a los huérfanos de la Guardia Civil. En la actualidad se llevaría la palma el duque empalmado. Pues presuntamente se lo estaba llevando por actividad presuntamente sin ánimo de lucro o benéfica, lo que es de una bajuna moral pestilente. Pues si apropiarse de comisiones de los constructores para perderse por los paraísos del mundo es de golfos, usar alma benefactora para valorizar lo humano,  y construirse palacios u otro tipo de dádivas egoistonas, de manera presunta, es típico de gente amoral y escueta de sentimientos que no debería poder mirarse en el espejo.

Como habría que buscar título para este suplemente se me ocurren varios: Chorisuplemento en castizo, Chorizos news en idioma internacional, o Capone news, Cacolandia, Alma trincona, Arrebatacapas o Patio de monipodio o solo La ladronera, sin eufemismos, aunque dejo a los lectores que aprieten la imaginación. Así aparecerá el nombre más exacto para el suplemento ya que muchos ojos ven más que dos, y yo estoy empezando a bizquear porque es imposible mirar a tantos lados como tiene este latrocinio. Como la gente, ya estoy harto de este montón de mierda diaria que huele como un jardín de boñigas que no fertilizan la tierra, sino los bolsillos de los presuntos protagonistas de este presunto suplemento.

    Sin falsa modestia creo que la idea es buena. Podríamos separar el grano de la paja, o la arena de las cagarrutas, y además tendríamos siempre juntitos a los pícaros, contaminándose solo a ellos mismos. Y además los periódicos tratarían más asuntos importantes que están enterrados en tanta mugre. Como el desempleo o las ideas políticas, que deberían llenar una y otra vez los comentarios de las tertulias. Y no ese tufo de los presuntos corruptos que nos envuelven en un paisaje general desolador y angustioso. 

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