El presidente francés, Nicolás Sarkozy, destacó este miércoles ante el Congreso estadounidense la larga tradición de amistad que une a los dos países, y que fue capaz de mantenerse, dijo, incluso en los "momentos de dificultades".
"Francia es amiga de los Estados Unidos. Siempre lo ha sido. Incluso en los momentos difíciles, de desacuerdos, hemos trabajado codo con codo", dijo Sarkozy, quien reconoció que ésta afirmación es difícil de pronunciar para un presidente francés.
En su intervención, la primera de un presidente francés ante una sesión conjunta del Senado y la Cámara de Representantes desde que París y Washington se distanciaron debido a la guerra de Irak, Sarkozy aseguró que EEUU es la "nación más grande del mundo".
El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, fue el invitado de honor en una cena de Estado que le ofreció su homólogo estadounidense, George W. Bush, en la Casa Blanca la noche del martes.
En la cena había más de cien invitados, incluyendo el vicepresidente de EEUU, Dick Cheney, la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, representantes del estado de Luisiana, empresarios, legisladores, miembros del poder judicial y deportistas.
La cena fue el primer acto de una visita de 26 horas del presidente francés a Estados Unidos. Antes de llegar al Congreso este miércoles, Sarkozy y Bush visitaron Mount Vernon, la casa de George Washington, el primer presidente de Estados Unidos, a unos 50 kilómetros de Washington y en el vecino estado de Virginia.
Esa visita evoca la alianza de ambos países en el último siglo y recuerda el apoyo francés a Estados Unidos durante la revolución que terminó con la independencia de este país a fines del siglo XVIII.
Pero, más que esos actos simbólicos, la visita de Sarkozy resalta el hecho de que ambos países han dejado atrás las divergencias por el problema de Irak.
Ahora, según los expertos, ambos presidentes están haciendo hincapié en lo que los une, como su rechazo a que Irán desarrolle armas nucleares y su respaldo a resoluciones de Naciones Unidas sobre la soberanía libanesa.
Incluso antes de ser elegido este año, Sarkozy reveló su intención de contribuir a un mejoramiento de las relaciones entre ambos países.
"Nunca entendí por qué tenemos que luchar contra Estados Unidos", señaló en una ocasión al referirse a los desacuerdos de su antecesor, Jacques Chirac, y el presidente Bush por la guerra en Irak.
Sarkozy recordó que en el siglo pasado los europeos debieron enfrentar "dos guerras abominables y vuestros padres nos vinieron a ayudar". Según señaló ante una reunión del Consejo Empresarial, "el pueblo francés nunca lo olvidará".
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