Off the record - 26 noviembre 2007

IBERIA: MADRID ECHA EL RESTO

La batalla por Iberia empieza a tener perfiles muy definidos. Según fuentes muy solventes a las que este Off The Record ha tenido acceso, la decisión de apartar a British Airways tiene muy fuertes respaldos y la actuación de Caja Madrid no ha sido, como pretende la “oposición interna” a Blesa, una decisión política impuesta al presidente de la entidad financiera.

El proyecto de Gala Capital no se ha desmoronado, ni mucho menos, como se publicó días atrás. Todo lo contrario. Saben que tienen que dialogar y pactar con Blesa, y saben lo que Blesa significa, pero están convencidos de ganar al final del recorrido. De la otra oferta española les gustaría atraerse a José María Castellanos. Saben que no es fácil, pero lo van a intentar.

No se rinden todavía en British Airways, que quiere hacer valer su condición de segundo accionista de Iberia, pero la convergencia de proyectos entre la oferta que tiene a British por socio industrial y la promovida por Gala Capital es imposible, porque uno de los objetivos de Gala es precisamente sacar a BA de Iberia.

Madrid apuesta fuerte por ser uno de los grandes nudos mundiales del transporte aéreo y Blesa se ha apuntado a ese proyecto, el de mayor valor añadido para la Comunidad. Lo de Iberia es sólo el comienzo.

UNA CONFERENCIA EN FORMATO “DE CÁMARA”

La primera conferencia de Rodrigo Rato tras su regreso a España no fue precisamente un éxito, ni por asistencia de público ni por eco mediático. El pasado viernes, apenas 200 personas acudieron al auditorio de Tenerife para escuchar al ya ex director del FMI. Al día siguiente, cierta sensación de vergüenza en la prensa local. “Poca gente, pocas autoridades…”, comenzaba un cronista local. “Rato se merecía más…”, escribía otro.

Muchos asientos vacíos en la sala de cámara del auditorio, poca y menos significativa presencia de empresarios, ausencia del mundo universitario, muy poco del top social del archipiélago, en suma, un ambiente gélido. Explican algunos que no es por el conferenciante, sino mal trabajo de los organizadores, que quisieron plantear el acto como un respaldo del carismático dirigente del PP al Ayuntamiento de Santa Cruz, en pleno ojo de un huracán judicial y político.

El PP canario intentó arropar a Rato: el presidente regional José Manuel Soria, el diputado Pablo Matos, Antonio Alarcó, incluso acudió la presidenta insular, Cristina Tavío, a pesar de encontrarse en guerra abierta con el organizador del acto, Angel Llanos, teniente de alcalde de Santa Cruz.

POCOS NACIONALISTAS, AUSENCIA DE SOCIALISTAS

De las filas nacionalistas estuvieron el ex presidente del gobierno Adán Martín, la portavoz en el Congreso y alcaldesa de La Laguna, Ana Oramas, y muy poco más. El PSOE, sencillamente, ausente, salvo un modesto consejero insular. “No por Rato, que bien lo sentimos, sino por los organizadores del acto, que están echados al monte”, comentó a este Off The Record un alto dirigente socialista canario.

Quizá se temían lo que sucedió, el curioso formato por el que el alcalde Zerolo y el teniente de alcalde Llanos permanecieron todo el acto en el escenario, junto al conferenciante. “Ya se que es por la foto, pero parecía como si estuviera vigilado por una pareja de la guardia civil”, comentó con humor un destacado periodista local.

PESIMISMO ¿O REALISMO? ECONÓMICO

En la posterior cena con autoridades y periodistas hubo un poquito más de calor, aunque no se le ahorraron al invitado un par de alegatos descorteses sobre el independentismo y la descolonización.

En el informal coloquio allí abierto, Rato dio pruebas de su proverbial honestidad conceptual al declararse incapaz de predecir el curso de la economía en los tiempos que vienen, aunque sus conclusiones fueron al menos inquietantes para el horizonte cercano español: reformas estructurales pendientes, crisis financiera en paralelo con una inflación en alza, baja productividad, sectores en declive, incontenible escalada del precio del petróleo.

A VUELTAS CON LA “DESCOLONIZACIÓN”

La campaña por la “descolonización” de Canarias, emprendida por el rotativo tinerfeño El Día, es el rayo que no cesa. El ya famoso diario editorializaba ayer, con el pie de la encuesta de la Fundación Bertelsmann en el que los canarios aparecen, tras vascos y catalanes, como “los menos identificados con España”, que se trata de “un descontento lógico, por el trato que reciben” de la metrópoli. El editorialista considera que la reciente celebración de un partido de la selección española en Canarias “no deja de ser una concesión más de quienes creen que en Canarias viven indígenas a los que de vez en cuando conviene obsequiar con una dádiva”.

El director y editorialista del rotativo lo tiene claro: “El canario (…) siempre se ha considerado guanche (…) los canarios no pueden continuar pareciendo que son inferiores a los españoles (…) la culpa de esta situación es del Estado, que ha maltratado y maltrata económica y políticamente a los habitantes del Archipiélago (…) Sólo queremos ser canarios (…) un país con identidad propia, con bandera y asiento en la ONU, la UE y la OTAN”. Mientras tanto, Marruecos, ojo avizor.

LAS ELECCIONES SIGUEN ABIERTAS

El argumento del “desfase” en la publicación de las oleadas del CIS, utilizado por José Blanco ante el recorte al 2,3 puntos de la ventaja del PSOE, tiene poco peso, asegura a este Off The Record uno de los sociólogos que dirigió años atrás el muy valorado organismo. En apenas un mes de tiempo, salvo sucesos realmente explosivos, la evolución no puede ser tan notable como para haber saltado a la ventaja de 6 puntos, como pretenden en Ferraz. “Punto o punto y medio, en más o en menos, como muy mucho”, afirma. Tiene más peso el argumento del Gobierno, sobre la influencia momentánea del caos ferroviario en Cataluña, tanto por las Cercanías como por las accidentadas obras del AVE, pero tampoco para tanto.

Entre los analistas de investigaciones sociológicas consultados por este Off The Record la impresión es que la oleada del CIS está publicada en tiempo y refleja la situación actual. Sin duda, ha “calentado” la precampaña, por dos razones. La primera, porque 2,3 puntos no garantizan la posición mayoritaria y desde luego quedan a distancia imposible de recorrer no ya de una mayoría absoluta, sino incluso de una mayoría que asegure gobernar.