“¿Cómo financiamos el desarrollo?”, indagó el Jefe del Estado a la audiencia del enlace radial de este sábado. Y su respuesta se inclinó a la explotación minera: “Son 100 mil millones de dólares en cobre” dijo al referirse a la reserva de dicho metal en la provincia de Zamora.
También manifestó que “el impacto ambiental que nos afectaría a todos debemos soportarlo” al plantear que no hay manera de obviar el factor costo beneficio, si se quiere acabar con la pobreza de la mayoría de los ecuatorianos.
¿Se deja todo intacto o se accede a la riqueza mineral que en el país bordea los 200 mil millones de dólares? El dilema es latente para el Mandatario, sobre todo porque reconoce la problemática del deterioro ambiental y el calentamiento global. En todo caso, la balanza se inclina a la necesidad de garantizar el bienestar de la población: “Si hay esos ingresos se va a tener que permitir que esa minería vaya en beneficio del desarrollo del pueblo ecuatoriano”, declaró.
Finalmente, al referirse sobre esta temática, advirtió que la propuesta de mantener el petróleo bajo tierra en el Parque Nacional Yasuní correrá la misma suerte, si no hay respuesta de las contrapartes internacionales en compensar la no explotación.