Arrancan las obras del Campus de la Justicia

El viejo sueño de acabar con la lentitud de la justicia va tomando forma. En Valdebebas, la Ciudad de la Justicia ya es algo más que un proyecto: desde enero, las grúas trabajan para dar forma a los edificios de un ambicioso complejo que aúna arquitectura de vanguardia y funcionalidad.

Esperanza Aguirre, rodeada de la plana mayor de la justicia, fue la encargada de apretar el botón que, simbólicamente, daba comienzo a las obras de los primeros cuatro edificios:el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la Audiencia Provincial, el Instituto de Medicina Legal y otro destinado a usos múltiples. El acto fue criticado por el Partido Socialista, que lo calificó de "puramente electoralista" y acusó al Gobierno regional de haberlo inaugurado ya tres veces.

El ochenta por ciento de las infraestructuras estarán operativas en 2011, según las previsiones del Gobierno regional, mientras que el resto entrarán en funcionamiento, como muy tarde, en 2012.

Será, en palabras de la presidenta, “un museo de la arquitectura al aire libre con más de 500.000 metros cuadrados. El primer complejo en construirse será el Instituto de Medicina Legal, obra del arquitecto Alejandro Zaera, que cuenta con una superficie de 9.360 metros cuadrados. Este centro sustituirá al Instituto Anatómico Forense, ahora ubicado en los aledaños de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense.

El aparcamiento del entramado judicial es obra del arquitecto Richard Rogers, y dispondrá de 1.175 plazas. El edificio, circular, contará con 45.000 metros cuadrados, de ellos 1.500 serán destinados al uso comercial, y 500 a restaurantes. Este edificio "humano y amable", según sus responsables, dispone de un presupuesto de 26 millones de euros.

Mientras, el Tribunal Superior de Justicia y la Audiencia Provincial, diseño del británico Norman Foster, ocuparán una superficie de 70.698 metros cuadrados, tendrán un coste entre los 100 y 125 millones de euros, y comenzarán a construirse en breve.

La sede del Tribunal Superior de Justicia ocupará una superficie de 25.698 metros cuadrados, tendrá 7 salas de vistas y 90 plazas de aparcamientos. Está marcada por una entrada alta y estrecha que da paso a un espacio central en forma de triángulo, donde se enfatiza la verticalidad. Desde el atrio el público podrá acceder a las siete salas de vista por medio de ascensores rápidos.

Por otro lado, el edificio de la Audiencia Provincial, caracterizada por la líneas onduladas, tendrá una superficie de 45.000 metros cuadrados, y estará distribuida en seis niveles, con dos plantas subterráneas adicionales. La construcción estará presidida por una amplia entrada y un atrio interior cubierto con un techo acristalado.

Además, un amplio espejo de agua en la planta baja, refleja la luz natural y refresca de forma pasiva el ambiente, al mismo tiempo que humidifica el aire. El ahorro energético de estas construcciones de Foster es una de sus características.
Por una parte, gracias a su orientación y a los revestimientos que incorporarán sistemas de protección lumínica se reduce la exposición solar directa de los espacios internos. Esto proporcionará sombra donde sea necesario. Del mismo modo, los jardines y amplios patios interiores favorecen las posibilidades de ventilación natural.

A lo largo de este año, el Gobierno regional adjudicó, además, las obras del Decanato —obra de Rubén Picado— y los juzgados de lo Contencioso-Administrativo, de lo civil y de Menores, obras, respectivamente, de Fernando García Pino, Zaha Hadid y Rafael de la Hoz.

Al servicio de los ciudadanos
El Campus de la Justicia acogerá 371 órganos unipersonales y 62 colegiados, y tendrá una reserva de 118 unipersonales y 18 colegiados, permitiendo que jueces, fiscales y funcionarios trabajen al servicio de la justicia.

El complejo albergará, además, el primer Museo del Crimen de España, donde se expondrán piezas de la historia policial y penitenciaria, así como de los crímenes más notorios a nivel nacional. Numerosas piezas de los depósitos judiciales de Madrid y otras que conserva el profesor José Manuel Reverte, de la Universidad Complutense, dotarán los fondos del museo.

En diciembre, el Consejo de Gobierno aprobó la construcción de una central térmica que produzca la energía necesaria para el funcionamiento de todo el complejo. Un intercambiador permitirá, además, canalizar la afluencia de trabajadores y visitantes al complejo, que será, gracias a esta infraestructura, “un lugar sin coches” al que se podrá acceder en transporte público y por el que será posible desplazarse gracias a un sistema de pérgolas y pasillos rodantes. Además, la Comunidad de Madrid está trabajando en la posibilidad de que el complejo incluya una galería de arte que muestre los objetos de valor relacionados con la justicia que actualmente adornan los juzgados madrileños.

Para ir abriendo boca, los madrileños podrán visitar el futuro Campus de la Justicia a través de Internet antes de que concluyan las obras: la Comunidad está creando una recreación virtual del complejo en Second Life, que en breve ofrecerá a los internautas la posibilidad de pasear por sus edificios e, incluso, presenciar juicios virtuales.