Desaparece un testigo del siglo XX: Volodia Teitelboim

Su hija Marina, su secretaria personal y una enfermera auxiliar que lo acompañó en sus últimos días, estaban junto a él cuando falleció, en la clínica de la Universidad Católica. De 91 años, Teitelboim, se encontraba internado desde el pasado 15 de enero en el recinto hospitalario.

Durante la tarde del jueves sufrió numerosas variaciones de su presión arterial, lo que según se informó puso en alerta al equipo médico que lo cuidaba. Destacado militante y ex dirigente del Partido Comunista, Teitelboim sufrió problemas en su sistema renal y respiratorio, que terminaron por extinguir su vida.

La familia del ex senador pidió expresamente que en sus últimos momentos de vida, Teitelboim no fuese asistido artificialmente para prolongar la actividad de sus signos vitales, teniendo en cuenta su estado de paciente terminal.

Teitelboim no sólo fue una figura literaria relevante, sino además, desempeñó un rol político de primera línea como secretario general del Partido Comunista, entre 1989 y 1994. Desde 1973 hasta el término de la dictadura, Volodia Teitelboim se dirigió a los chilenos por intermedio del programa “Escucha Chile”, de Radio Moscú.

Valentín Teitelboim Volosky nació el 17 de marzo de 1916 en Chillán y en sus 91 años de vida fue novelista, biógrafo, ensayista, político y Premio Nacional de Literatura 2002. Estudió leyes en la Universidad de Chile e ingresó a las Juventudes Comunistas (JJ.CC.) a los 16 años, siendo presidente del centro de alumnos de la Escuela de Derecho. Muy joven adoptó el nombre de Volodia.

Trabajó como periodista en la sección de deportes del hoy desaparecido Diario Ilustrado, dirigió en el exilio la revista “Araucaria de Chile”, publicada trimestralmente en Madrid durante doce años, y colaboró en el diario El Siglo. En la década de los años 40 vivió en la clandestinidad, sufrió encarcelamientos y estuvo detenido en el campo de concentración de Pisagua.

Los restos de Teitelboim serán trasladados hoy viernes hasta el ex Congreso Nacional para que allí pueda recibir el homenaje de sus seguidores y de los dirigentes políticos que en los últimos días de su vida lo visitaron en la clínica, como lo hizo la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet.

Apenas se produjo su deceso, el actual secretario general del Partido Comunista, Guillermo Teillier, comentó que Teitelboim "fue un gran argumentador de la unidad del pueblo, un luchador infatigable por la dignidad y los derechos de los trabajadores".

Refiriéndose al "querido compañero Volodia Teitelboim", dijo que el PC se sentía orgulloso de haber contado con su quehacer político y expresó sus condolencias y las de su colectividad a Marina, la hija del escritor, y a "todos quienes lo admiraron y lo conocieron".