Vecinos y ecologistas rechazan la Operación Campamento porque "pretende hacer negocio a costa de la vivienda"

  El Consejo de Ministros aprobó en 2006 el desarrollo de esta actuación urbanística mediante la liberalización de nueve millones de metros cuadrados de suelo de uso militar, que acogerán en un futuro un nuevo barrio de Madrid con más de 22.000 viviendas, donde residirán unas 50.000 personas. El barrio estará articulado en torno a una gran avenida que llevará el nombre de Fuerzas Armadas, después de que el Ayuntamiento haya dado el visto bueno a esta propuesta estatal.

   Los colectivos que se muestran en contra del desarrollo urbanístico señalaron que además de haberse detectado "numerosos incumplimientos legales" en el planeamiento sometido a información pública, la iniciativa que van a llevar a cabo Ministerio de Defensa, Ayuntamiento y Comunidad de Madrid "no es más que una operación especulativa de suelo público del que las tres administraciones, además de las empresas constructoras adjudicatarias, obtendrán importantes beneficios económicos y de la que saldrá perjudicada la ciudad y sus habitantes".

   Estos colectivos explicaron que si la operación sale adelante se crearán dos nuevos grandes barrios separados por la A-5, uno en un entorno privilegiado reservado para clases altas y otro de clase media-baja, que se dotarán de escasos equipamientos, zonas verdes e infraestructuras de transporte público. "Los nuevos barrios provocarán un elevado incremento de habitantes en una zona que ya presenta una excesiva densidad de población y enormes carencias asistenciales y de servicios públicos", criticaron.

   Asimismo, denuncian que la Operación Campamento es altamente agresiva con un valioso entorno natural conformado por las riveras de los Arroyos Valchico y Meaques, el Pinar de la Dehesa y una gran extensión de retamares.