Varios países europeos ya están instalando este dispositivo electrónico denominado Control Inteligente de Velocidad, o “alcolock”. La utilización de este aparato esta destinada a vehículos de conductores sancionados por manejar borracho.
En España, el “alcolock” podría evitar 2.885 accidentes de tráfico, salvar 115 vidas al año y evitar 568 heridos graves, según un estudio de la Fundación Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil (FITSA). Entonces, se concluye que la reducción del número de accidentes con víctimas es de un 65% entre los conductores
Informes recientes de la OMS indican que entre el 30% y el 50% de los accidentes en carreteras son debidos al alcohol. Sólo en Estados Unidos entre el 50% y el 75% de los conductores accidentados ya se les había retirado el permiso de conducir por ponerse al volante ebrios. Esto indica la tendencia a reincidir en le mortal hábito.
El “alcolock”, conectado a los sistemas de potencia y electrónicos del automóvil, evita que el conductor pueda poner el vehículo en marcha si al soplar por la boquilla del aparato, éste registra una tasa de alcohol superior s los 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre;
La instalación también tiene una auténtica caja negra donde se registra toda la información de cada intento de encendido del vehículo: los resultados de las pruebas, los intentos de arrancar el vehículo sin superar el test, las fechas, las horas y los niveles de alcohol.
El sistema que cuesta unos 1.200 euros anuales. puede instalarse en un vehículo de forma voluntaria o coordinada por los programas de rehabilitación a conductores con dependencia del alcohol.