América Móvil, la empresa de telefonía móvil de Carlos Slim, se ubicó rápidamente en el mercado hispano de Estados Unidos, a través de su filial Tracfone.
Al cierre de junio del presente año, la compañía sumó un total de 10.1 millones de clientes, mientras que en 2004 tenía 3 millones y en 2000 sólo contaba con 200 mil usuarios.
La oferta de Tracfone está dirigida a los paisanos, principalmente, y funciona con el esquema de prepago.
Cabe destacar que esta empresa no tiene infraestructura propia, sino que es un revendedor, es decir, compra tiempo aire a otros operadores y luego los comercializar bajo su marca propia.
En realidad, el consumo de sus clientes es bajo, pues el ingreso promedio por usuario mensual (ARPU, por sus siglas en inglés) es de 11 dólares, según el último reporte financiero de América Móvil al segundo trimestre de 2008.
Con esto, en el primer semestre del año Tracfone tuvo ingresos por 728 millones de dólares y un flujo de operación en el segundo trimestre del año que triplicó al del año previo, al llegar a 88 millones de dólares.
Pero Tracfone no está sola en este mercado; enfrenta la competencia de Movida, otra empresa que también llega al público hispano y con el mismo sistema de prepago.
Esta telefónica entró a Estados Unidos en 2005 y también ofrece servicios de valor agregado como transferencia de dinero.
Bajo el lema de comercialización “la manera más económica de tener un celular”, y con ofertas agresivas, como por ejemplo comprar un teléfono celular por 10 dólares y pagar 20 dólares por el servicio cada tres meses, Tracfone se ha posicionado como la primer compañía del servicio celular del esquema de prepago en el mercado estadounidense.
En México, el único operador de telefonía móvil con capital estadounidense es Nextel, aunque esta empresa está enfocada al segmento de altos ingresos o corporativos.
A diferencia de lo que sucede en Estados Unidos, en México no hay empresas comercializadoras o revendedoras de telefonía celular, que es el esquema bajo el que opera Tracfone.
Sin embargo, ya hay solicitudes de algunas compañías interesadas en participar en el mercado mexicano bajo esta figura, pero hasta el momento no han sido autorizadas.
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