"Nos ha movilizado la torpeza de un Gobierno que se ha dejado coaccionar por un asesino"

Precedió la marcha un gigantesco lazo azul dibujado sobre una tela blanca que fue desplegado por los jóvenes de Nuevas Generaciones del PP. Los manifestantes, que portaron lazos azules en sus solapas, y numerosas banderas españolas, fueron ocupando el tramo de la calle Alcalá entre la Puerta de Alcalá -de donde debería haber partido la manifestación- y la plaza de Cibeles. "Zapatero dimisión", "Zapatero traidor", "Zapatero, embustero", o "En mi nombre no" fueron algunas de las frases más repetidas durante el recorrido.

Junto a Rajoy en primera fila, estaban también los principales dirigentes del PP, su secretario general, Ángel Acebes, la presidenta del partido en el País Vasco, María San Gil, la concejala popular de Azkoitia Pilar Elías, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, o el portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana; así como todos los líderes regionales del partido. También ocupan un lugar destacado, la concejala del ayuntamiento de Madrid Ana Botella, así como algunas víctimas del terrorismo, como María del Mar Blanco.

Durante la marcha, la presidenta regional, Esperanza Aguirre, afirmó que "somos muchos los españoles que no estamos de acuerdo con el que Gobierno ceda al chantaje". "Es un error craso del Presidente", dijo. Y agregó que "que no se diga que el PP excarceló a etarras. No es cierto". También el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, señaló que la manifestación convocada por el PP, "es una voz, un grito sereno de reflexión ante un error profundo" del Gobierno. Por su parte,  el secretario general del PP, Ángel Acebes, se mostró convencido de que la manifestación se va a convertir en "un hito histórico de la democracia", ya que demuestra que los españoles "han decidido que no se van a someter al chantaje de los terroristas".

Entre los asistentes se encontraban además algunos de los familiares de Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate, los dos ecuatorianos asesinados por ETA en el aparcamiento de la T-4 del aeropuerto de Barajas. La madre de Estacio justificó su presencia en la necesidad de estar junto a los familiares de otras víctimas de la organización terrorista y compartir con ellos el dolor de la pérdida de un ser querido. Del mismo modo, las víctimas están representadas en la marcha por algunos de los principales colectivos de víctimas, entre ellas, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), el Foro de Ermua, la Fundación Miguel Ángel Blanco, la Fundación Gregorio Ordóñez o Covite.

La Comunidad de Madrid cifró en 2.125.000 personas la asistencia a la manifestación. En un comunicado, los técnicos de la Dirección General de Seguridad de la Comunidad de Madrid informan de que la movilización se ha desarrollado "con normalidad y sin incidentes". Destacaron además que se ha registrado "un lleno" en las calles adyacentes y otras vías públicas de los barrios de Salamanca y Chamberí que, indicaron, "se vieron también colapsadas". Por su parte, la Delegación del Gobierno en Madrid contabilizó 342.655 personas en la manifestación. Un portavoz de la Delegación del Gobierno informó de que esta cifra corresponde al acta policial de asistencia estimada.

Manifiesto en Colón
Pasadas las 18.30, la cabecera llegó a la plaza de Colón donde el líder del PP, Mariano Rajoy, leyó el comunicado que cerró el acto. Antes, un vídeo proyectado en las pantallas instaladas en la plaza madrileña rindió homenaje a las víctimas del terrorismo.  Unas declaraciones de José Antonio Ortega Lara, secuestrado por ETA, abrieron el montaje audiovisual y, en ellas, esta víctima de la banda aseguraba comprender porqué el entonces Gobierno del PP no negoció con ETA para liberarle. Después aparecieron una serie de imágenes de ciudadanos agradeciendo a las víctimas su sacrificio y prometiéndoles que no les olvidarán.

Después, Rajoy leyó el manifiesto en el que afirmó que "excarcelar a un terrorista es el peaje que paga el Gobierno para poder negociar". La plaza de Colón, cuyos jardines se encontraban abarrotados de manifestantes, acogió un escenario flanqueado por dos grandes lazos azules y el lema de la convocatoria "España por la libertad. No más cesiones a ETA". La manifestación finalizó con el himno de España.

Más de 1.000 autocares se desplazaron a Madrid desde distintos puntos de España. Los autobuses aparcaron  en la glorieta de Carlos V, la calle de Alfonso XII y en las inmediaciones del parque del Retiro y de la Puerta de Alcalá, que lucía un gran lazo azul por ser el punto de partida de la marcha.  Muchos de los ciudadanos se acercaron a la plaza de la República Dominicana para rendir homenaje a las doce víctimas de ETA asesinadas en ella el 14 de julio de 1986, en un atentado en el que participó De Juana Chaos. Estas personas depositaron ramos de flores, muchos con los colores de la bandera española o adornados con ella, velas o cruces blancas.