La gestión de la venta de acciones la lleva el Dredsner Bank
Repsol tiene otros 'pretendientes' entre los que no están las grandes petroleras
lunes 24 de noviembre de 2008, 13:26h
Ni la Shell ni Texaco, ni Total. El Desdner Bank, encargado de gestionar la venta del paquete accionarial que Sacyr Vallehermoso en Repsol, tiene instrucciones contundentes al respecto. El candidato debe proceder de una economía emergente, tener capital totalmente privado y ocupar un segmento importante en el sector energético sin poner en peligro, por ello, los actuales equilibrios mundiales en materia de producción y suministro.
En este sentido, en Repsol reconocen que se han mantenido contactos con varias compañías, una india, otra china, y la archiconocida KIA. De las tres sólo ha trascendido la identidad de la Agencia Kuwaití de Inversiones, tristemente conocida en España por sus inversiones en los años 90 y por haber puesto al frente de las mismas al financiero Javier de la Rosa condenado por estafa y apropiación indebida. Por su parte, la china no es otra que China Petroleum Nacional Corporation, CNPC.
El problema es que las tres compañías mencionadas son de titularidad estatal o bien tienen capital público por lo que una operación de compra de acciones es inviable debido a la legislación española y europea en la materia.
Entre los candidatos también se encuentra Lukoil, según reconocen fuentes de Repsol. "En su día, el Dredsner ofreció una lista en la que figura la petrolera rusa, junto a Gazprom. Esta última fue rechazada debido precisamente a su carácter, idéntico al de las anteriormente mencionadas, pero Lukoil reúne, principio, los requisitos necesarios para poder optar a la compra. Otra cosa es la negociación en sí, que depende del accionista que pretende vender", es decir, de Sacyr Vallehermoso.
En el mismo sentido, Repsol ha hecho pública una nota en la cual desmiente las informaciones publicadas este lunes por el periódico El Mundo. "Repsol YPF descartó en enero de 2007 un posible acuerdo con el grupo ruso Lukoil consistente en un cruce de participaciones accionariales, así como un acuerdo de participación conjunta en reservas de petróleo", aclara la petrolera.
"Este acuerdo, que tenía la finalidad de aumentar las reservas de crudo de la compañía española, iba a ser el fruto de negociaciones iniciadas a finales de 2006 con la compañía rusa", se dice en el mismo comunicado.
La petrolera indica además que su presidente, Antonio Brufau, "no recibió ninguna indicación por parte de ninguna persona ni de instancias externas a la compañía para la toma de dicha decisión."
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