La verdad es que poco, o nada, se espera del encuentro de mañana, ya que el PSE ha anunciado que su formación abrirá una ronda paralela con el fin de propiciar el relevo en la Lehendakaritza.
Se da la circunstancia de que así como la comisión nacionalista está integrada por el presidente del PNV,
Iñigo Urkullu, y el candidato a lehendakari,
Juan José Ibarretxe, entre otros dirigentes jekltzales, en la de los socialistas vascos no está presente su candidato a la investidura,
Patxi López. La conforman el presidente del PSE,
Jesús Eguiguren, y el vicesecretario general del partido,
Rodolfo Ares, además de los secretarios provinciales en Vizcaya, Álava y Guipúzcoa.
Urkullu y Ares cruzan sus argumentos a favor de Ibarretxe y de López
Mientras tanto, se va elevando el tono en el cruce de acusaciones entre unos y otros dado el acaloramiento con que siguen defendiendo la legitimidad de sus aspiraciones a colocar a sus respectivos candidatos al frente de la Presidencia del Gobierno vasco.
El presidente del Euskadi Buru Batzar, la ejecutiva del PNV, Iñigo Urkullu, ha vuelto a insistir en que su partido es el claro ganador de los comicios del 1 de marzo y ha acusado a los socialistas vascos de pretender
“dar un golpe institucional” en Euskadi por querer situar a López como lehendakari. Urkullu ha considerado “
irresponsable” que que, en la actual coyuntura económica, se someta a Euskadi a
"la inestabilidad o a experimentos" que pueden llevar a lograr la Lehendakaritza, pero también
"a la parálisis institucional" o a gobernar desde "
el frentismo". En contraposición, ha ofrecido
"un acuerdo de estabilidad en base a un Gobierno fuerte y estable" liderado por el PNV.
Previamente, el vicesecretario general de los socialistas vascos, Rodolfo Ares, en declaraciones a una emisora de radio, ha López, formará
"un Gobierno sin hipotecas", si el jeltzale Juan José Ibarretxe no logra "
sumar" los votos necesarios. Además, aseguró que hablará con todos
"para buscar el máximo respaldo posible", incluido el PNV, en torno a un Ejecutivo liderado por PSE-EE, y pidió a la formación nacionalista que "
no se rasgue las vestiduras" ni adopte la actitud de "'a los socialistas, ni agua'".
Madrazo sigue los pasos de Ziarreta, EA, y también anuncia su dimisión
Las consecuencias de los resultados electorales del pasado 1 de marzo están teniendo, por otro lado, nefastas consecuencias para dos de los claros perdedores de estos comicios, los líderes de Eusko Alkartasuna y Ezker Batua-IU, las dos formaciones que durante diez años han acompañado a Ibarretxe en sus dos gobiernos tripartitos. Hoy el afectado ha sido el coordinador general de la coalición de izquierdas, Javier Madrazo, que ha anunciado que pone su cargo a disposición de la dirección de la coalición. La misma anoche electoral hizo lo propio el presidente de EA,
Unai Ziarreta, que asumió de esta forma la decisión de no ir en coalición con el PNV a las elecciones.
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