La retirada de la candidatura de los Juegos Olímpicos de Invierno Aragón-Cataluña o la historia de la España dividida

Ya es oficial: la división y la falta de entendimiento entre españoles, en este caso entre aragoneses y catalanes, ha provocado la retirada definitiva de la candidatura de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030.

El Comité Olímpico Español (COE) anunciaba este martes que ante la falta de acuerdo entre el Gobierno de Aragón y el de la Generalitat de Cataluña, la candidatura de 2030 se encontraba bloqueada.

Esta decisión llegó tras plantearse en la Asamblea General Ordinaria del COE, celebrada el pasado 31 de mayo.

En ella, los miembros del organismo aprobaron que ante la falta de acuerdo político en la distribución de pruebas deportivas se exprimirían al máximo todos los esfuerzos con ambas comunidades autónomas, con el fin de presentar una candidatura conjunta.

"Si, por el contrario, no se llegaba a un acuerdo se daría por finalizada esta candidatura, sin perjuicio de abrir para más adelante la posibilidad de que cada uno de los territorios, y otros nuevos, presentaran al COE su propia candidatura, siendo la Asamblea General quien decidiría, como ya se ha hecho en otras ocasiones, cuál de ellas sería la más adecuada para ser presentada al Comité Olímpico Internacional para futuras ediciones", explica el COE.

Explicaciones

Desde que se acordó la presentación de un proyecto conjunto, el COE dice que defendió esta decisión, asegurando que, si no se llegaba a un acuerdo para la candidatura de los Juegos de invierno de 2030, se mantendrían las conversaciones con el Comité Olímpico Internacional para optar a la organización de futuras ediciones.

Ahora las favoritas para los Juegos de invierno de 2030 serán las otras 3 candidatas: Sapporo (Japón), Salt Lake City (Estados Unidos) y Vancouver (Canadá).

Tras esta ruptura total entre aragoneses y catalanes para sacar adelante esta candidatura, Madrid retoma el proyecto, no oficialmente, para ser candidata por tercera vez a los Juegos de verano, quizás para 2036, la siguiente cita sin sede, tras la aprobación de París para 2024, Los Angeles para 2028 y Brisbane para 2032.

Madrid había descartado aspirar a organizar unos Juegos mientras que hubiera otra candidatura olímpica vigente, en el caso de que hubiera seguido adelante la de Aragón-Cataluña para los Juegos de Invierno.