La guerra de Ucrania ha tomado un nuevo rumbo después de 209 días de ofensiva rusa tras la última maniobra de Putin de movilizar a la población para la guerra.
El presidente ruso ha anunciado la movilización de hasta 300.000 reservistas para combatir en el frente y ayudar a "liberar el Donbás", así lo anunció en su primer discurso a la nación desde el comienzo de la guerra.
Ante ello, muchos rusos han comenzado a protestar y se habla de que cerca de un millar habrían sido detenidos en el país. Alemania ha dado un paso al frente y ha comunicado que ofrecerán asilo político a todos los que deserten del ejército y necesiten protegerse.
“Quien se oponga valientemente a Putin y se ponga así en grave peligro puede solicitar asilo político en Alemania”, así lo ha informado la ministra del Interior germana, Nancy Faeser.
La condición de asilo se verificará caso por caso
La ministra ha recordado que "los desertores amenazados de fuertes represiones reciben por lo general protección internacional en Alemania", aunque ha resaltado que, como en otras ocasiones, la condición de asilo político se validará caso por caso y se seguirá llevando un control de seguridad minucioso.
Ha subrayado también que el país germano lleva acogiendo desde hace meses a ciudadanos rusos disidentes o perseguidos. Ha criticado a Putin y a la "represión interna" que realiza en Rusia, pues considera que de su "desprecio por la humanidad" no se libran ni sus propios soldados.
La UE debate una decisión conjunta sobre la acogida de ciudadanos rusos
Mientras en el seno de la Unión Europea se está debatiendo a nivel general qué posición adoptar ante la crisis que se avecina. Con el último movimiento de Putin se espera una afluencia masiva de rusos a Europa, especialmente a los países más cercanos.
Desde el pasado mes de febrero alrededor de 500.000 rusos han salido del país, una cifra que se incrementará notablemente tras la movilización militar anunciada por Putin.
Bruselas quiere adoptar una decisión conjunta, aunque dentro de los 27 hay discrepancias, pues Estonia, Letonia y Lituania han decidido ya cerrar sus fronteras con Rusia mientras Finlandia estudia qué hacer, pues no quiere convertirse en un país de tránsito, han señalado desde el Ejecutivo.
El portavoz de la Comisión Europea, Peter Stano, ha remarcado la "solidaridad" de la UE con los ciudadanos rusos que demuestran "coraje y valentía" al oponerse a las últimas maniobras del régimen. RTVE también recoge las declaraciones de otro portavoz comunitario en las que señala que las solicitudes para la entrada en la UE deben seguir el "derecho comunitario", aunque ha reconocido la excepcionalidad de la situación actual y cada país analizará caso por caso.
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