A finales de 2022 una serie de cartas bomba llegaron a varias administraciones en España. La más sonada fue la que llegó a la embajada de Ucrania en Madrid, pues llegó a explotar y un trabajador resultó herido.
Llegaron a detectarse hasta 6 sobres sospechosos, algunos dirigidos al presidente Pedro Sánchez y a la ministra de Defensa Margarita Robles.
La investigación reveló que todas las cartas habían sido enviadas desde Valladolid, pero hasta el momento no han trascendido más datos.
Pero ahora el diario estadounidense 'The New York Times' ha publicado que el Movimiento Imperial Ruso está detrás de estas misivas.
Creencias del gobierno de EEUU y otros países europeos
Según ha revelado el citado diario mencionando a funcionarios del Gobierno de Estados Unidos, es la creencia de la inteligencia estadounidense así como de otros países europeos.
Las fuentes consultadas por dicho periódico subrayan que la inteligencia militar rusa ordenó a este movimiento llevar a cabo la iniciativa.
El Movimiento Imperial Ruso es un grupo ultraderechista con 2 centros de entrenamiento en el país. Además posee contactos con diversos grupos ultraderechistas en varios países europeos, entre los que se encuentra España.
Siempre según lo que ha indicado The New York Times, habría sido el Directorio Principal del Alto Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia (GRU) quien encargó la tarea al movimiento. Aseguran tener constancia de que miembros de este movimiento habrían estado recientemente en España.
El GRU es considerada por EEUU una de las agencias de inteligencia más agresivas de Rusia que habría estado detrás de las injerencias de las elecciones de 2016, entre otros asuntos.
En cuanto al objetivo de estas cartas bomba, las fuentes del diario resaltan que se trataba de dar un aviso o señal de advertencia de la capacidad de Rusia para cometer atentados en toda Europa. Especialmente en las capitales de los miembros de la OTAN que ayudan a Ucrania, como es el caso de Madrid, lugar donde tuvo lugar la última cumbre aniversario de la Alianza.
Por su parte, Rusia ha negado dicha información a través de las redes sociales.
Desde su embajada en España ha asegurado que la información publicada por NYT no contiene ninguna prueba y critica el eco que se está haciendo en la prensa española.
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