Las maletas, según un comunicado remitido a diariocrítico por la propia Guardia Civil, fueron detectadas en el Aeropuerto de Sevilla por perros detectores de drogas pertenecientes al Grupo Cinológico de la Comandancia de Sevilla, por lo que el Equipo Antidroga de Policía Judicial de la Comandancia montó un dispositivo para detener a los posibles “correos” cuando fueran a recoger las maletas detectadas.
El primero de ellos, que intentaba recoger una maleta negra tipo “trolly”, procedente de Sudamérica, fue un hombre de unos treinta años de edad, que se acercó al mostrador y al solicitar con su correspondiente resguardo la maleta, fue inmediatamente abordado por los guardias civiles, que se encontraban de paisano en las inmediaciones.
La otra intervención se produjo en el mismo lugar, aunque en este caso la existencia de un retraso evitó que la persona que tenía que recoger la maleta lograra hacerlo, aunque al poco tiempo, una vez la maleta en la oficina de equipajes perdidos, se presentó por ella una mujer de unos 40 años que acredita con la documentación necesaria el derecho sobre la misma.
El comunicado añade que ambas personas fueron invitadas por la Guardia Civil para que les acompañasen a dependencias de la Benemérita en las instalaciones aeroportuarias, donde al abrir la primera maleta aparecieron entre la ropa unos pasteles y alfajores de chocolate, perfectamente embalados en sus cajas pero que provocaron la sorpresa de todos al partir por la mitad uno de estos y encontrar una sustancia que podría ser cocaína.
Tras la práctica del correspondiente droga-test y dar resultado positivo a la cocaína, los agentes procedieron a la detención de P. R. S. Q., de nacionalidad argentina y a la intervención de la droga contenida en los supuestos pasteles, que alcanzó un peso de 8.740 gramos.
En la segunda maleta se encontraron más “pasteles de chocolate”, cuyo “relleno” dio igualmente positivo como cocaína, con un peso aproximado de 8.670 gramos, por lo que los agentes procedieron a la detención de su presunta propietaria, identificada como M. I. M., también ciudadana argentina.
Además, agrega el comunicado, se ha conseguido incautar otras dos importantes partidas, (con otros 18 kilogramos de cocaína) y la detención de cinco personas, con un modus operandi similar, por fuerzas de este Cuerpo de la Guardia Civil de la Comandancia de Granada.
La fuente agrega que la Guardia Civil se ha visto sorprendida por el sofisticado modo de ocultación de la cocaína, muy bien camuflada con la forma de “apetitosos” pastelitos y alfajores de chocolate, e indica que al tratarse de cocaína en estado puro la misma, una vez tratada, podría haberse convertido en más de 100 kilogramos tras ser cortada para su venta al menudeo.
La trascendencia del servicio, concluye el comunicado, es mayor si se tiene en cuenta que el total de droga intervenida por las policías argentina, chilena y la Guardia Civil “asciende casi a 60 kilogramos de una cocaína que podría llegar al 90 por ciento de pureza, es decir se ha conseguido eliminar del mercado ilícito, lo que podrían ser 300 kilogramos de droga, una vez adulterada y cortada para su venta al consumidor final”.
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