La semana pasada, mientras los presidentes de Colombia, Brasil y Chile eran considerados como los líderes políticos más valorados, según un estudio realizado por una encuestadora entre empresarios a escala mundial, en Ecuador varias de estas empresas, incluida una muy ligada al oficialismo, informaron sobre un aumento de ciertos indicadores de valoración negativa del presidente Correa.
Obama, Sarkozy y Uribe fueron los mejor valorados. Contrariamente de lo que ocurría hace poco tiempo, al presidente Correa no se le ubica entre los líderes más valorados. El estudio abarcó a 987 personas, de las cuales 687 son empresarios y 300 gobernantes y políticos de Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú y España.
Las encuestadoras ecuatorianas Perfiles de Opinión y Cedatos indican que el Presidente, pese a los escándalos relacionados con su hermano Fabricio, mantiene estables sus índices de aprobación, pero la desaprobación pasó de 40 a 43 puntos.
Sin embargo, recuerdan los analistas de estas empresas que en octubre del 2008 el Presidente tenía una aprobación del 70 por ciento, y que desde entonces tiende a disminuir.
¿Qué ha pasado si es que las denuncias contra su hermano mayor no han disminuido su aprobación? Tal vez sea cansancio respecto al discurso oficial demasiado machacón en cuanto a promesas, descripción de planes y medidas por cumplir, y referencias al pasado a manera de justificación de sus decisiones. ¿Acaso sea que sus seguidores comienzan a reclamar de su líder un cambio?