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Rulfo, de los más traducidos

Rulfo, de los más traducidos

miércoles 16 de mayo de 2007, 05:54h
El escritor mexicano Juan Rulfo, autor de "El llano en llamas" y "Pedro Páramo", nació el 16 de mayo de 1917.

De personalidad tímida y ensimismada, reacio a dar entrevistas pero admirado y reconocido por escritores universales. Rulfo, uno de los escritores mexicanos más apreciados en el orbe y cuya obra ha sido traducida a casi todos los idiomas, vio la luz primera en Apulco, una localidad cercana a San Gabriel Jalisco.

Pero el hecho de haber sido registrado en la ciudad de Sayula, ha ocasionado que muchas biografías fechen ahí su lugar de nacimiento.

Antes de ganar reconocimiento mundial debido a su obra literaria, el escritor contemporáneo y coterráneo de otro grande literato como es Juan José Arreola, desempeñó varios oficios y trabajos: fue vendedor en una empresa llantera y oficinista en la Secretaría de Gobernación, así como en el Instituto Nacional Indigenista (INI).

Sus padres fueron Juan Nepomuceno Pérez Rulfo y María Vizcaíno Arias, quienes contrajeron nupcias el 31 de enero de 1914 y al nacer su hijo lo bautizaron con el nombre de Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, nada menos que el autor de "El llano en llamas" y "Pedro Páramo".

Su familia, compuesta también por sus hermanos Severiano, el mayor, Francisco y Eva, se estableció en 1919 en San Gabriel, donde cuatro años después fue asesinado su padre.

Estudiante de primaria en la escuela de las monjas Josefinas, desde muy pequeño Juan Rulfo emprendió sus primeras lecturas de la biblioteca que un cura, de nombre Irineo Monroy, había depositado en la casa de su madre en 1926.

Cuando cumplió 10 años fue enviado por su madre, junto con su hermano Severiano, a un internado de la capital del estado de Jalisco para continuar sus estudios. A finales de ese 1927 falleció su madre.

Después de abandonar el internado en 1932, el joven intentó ingresar a la preparatoria de la Universidad de Guadalajara, pero al encontrarse la institución en huelga, decidió al año siguiente continuar sus estudios en un seminario e hizo un viaje a la capital del país.

Para 1936 hizo el intento de estudiar Derecho y de ingresar a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y al no conseguirlo, acudió a clases como oyente.

Por esas fechas el también autor de las obras llevadas al cine "El gallo de Oro" y "La fórmula secreta", quien habría de crear todo un particular estilo de narrar, entró a trabajar a la Secretaría de Gobernación, donde conoció al escritor Efrén Hernández.
Sigue Juan Rulfo, uno de los... dos... Hernández

A partir de ese momento se sabe de la actividad literaria de Rulfo fue seguida muy de cerca por Hernández, quien en 1940 llevó a la revista "Romance", dirigida por Juan Rejano, algunos fragmentos de la novela del jalisciense "El hijo del desaliento".

El texto no se publicó y de él solamente se tiene referencia de un fragmento que lleva por título "Un pedazo de noche".

Luego de realizar algunos viajes por el país Juan Rulfo regresó en 1941 a Guadalajara, ahí se estableció y colaboró en 1943 junto con Efrén Hernández en la revista "América", que se editaba en la Ciudad de México.

Al año siguiente escribió el cuento "La vida no es muy seria en sus cosas" y de la cual, se puede decir, marcó el inicio de su producción. Esta narración fue publicada dos años más tarde en la citada revista.

En en el año 1945 publicó los cuentos "Nos han dado la tierra" y "Macario", en la revista "Pan" de Guadalajara, a la postre ambos formaron parte del libro "El llano en llamas".

En 1946 regresó a la Ciudad de México para trabajar en las oficinas de la empresa Goodrich Euskadi, desde ahí escribió para la revista América su cuento "Macario" y fue esta misma casa editorial la que publicó "Es que somos muy pobres".

Más tarde el autor le confesó a su novia y futura esposa Clara Aparicio, su intención de escribir un texto que llevaría por título "Una estrella junto a la luna", misma que se convertiría en "Pedro Páramo".

En sus cartas a Clara, Rulfo hablaba de sus actividades como fotógrafo aficionado, de sus viajes seguidos a los volcanes cercanos a la Ciudad de México y de su intento de trabajar en la industria del cine. Asimismo, de sus compras de libros y de su asistencia a conciertos sinfónicos, al ballet y al cine.

Un mes antes de cumplir los 31 años Rulfo se casó con Clara Aparicio y luego, en 1948, publicó su cuento "La cuesta de las comadres", del cual semanas antes fueron leídos algunos fragmentos por radio.

A finales de ese año empezó a viajar por el país como vendedor de la empresa Goodrich Euskadi, lo que según se sabe aprovechó para sacar algunas placas fotográficas, actividad en la cual también tuvo gran sensibilidad.

La revista "América" publicó sus primeras imágenes en 1949 y al año siguiente se comentó que Rulfo preparaba un artículo, con fotografías suyas, sobre el Castillo de Teayo, zona arqueológica veracruzana.

El trabajo fotográfico de Rulfo, a diferencia de su obra literaria publicada, fue amplio y de ello es muestra la guía "Caminos de México", que fue ilustrada con placas suyas. En fechas posteriores, aparecieron trabajos suyos semejantes.

Pero sin duda, su mayor pasión fue la literatura, continuando en los siguientes años con otras importantes publicaciones como el cuento "Talpa", "El llano en llamas" (1950) y "Diles que no me maten" (1951).

De 1952 a 1953 cubrió su primer periodo como becario del Centro Mexicano de Escritores y del 1953 a 1954 el segundo.

Su primera libro lo editó el Fondo de Cultura Económica (FCE), casa editorial bajo la cual apareció "El llano en llamas" en 1953, con 15 cuentos.

El volumen fue incrementado en su edición de 1970 con los cuentos "La herencia de Matilde Arcángel" y "El día del derrumbe", aparecidos en revistas en 1955, el primero con algunos cambios respecto a su primera publicación.

A mediados de 1954 Rulfo entregó al Centro Mexicano de Escritores una copia mecanográfica con unas pocas correcciones a mano, de la novela que en ese momento llevaba el título de "Los murmullos", y que en entrega posterior al FCE, cambiaría por el de "Pedro Páramo".

En ese mismo año aparecieron en las revistas "Letras patrias", "Revista de la Universidad" y "Dintel"; pero no fue sino hasta 1955 cuando su obra fue publicada íntegra por el Fondo de Cultura Económica.

Un par de años después, Rulfo recibió el Premio "Xavier Villaurrutia" por este libro, que a partir de ese momento, fue traducido a diferentes idiomas, siendo el primero el alemán.

Para 1959, mientras trabajaba en la Comisión del Papaloapan, realizó junto a Antonio Reynoso el cortometraje "El despojo", filmado en el estado de Hidalgo.

Al año siguiente se trasladó con su familia a Guadalajara, donde trabajó en una empresa de televisión y preparó un libro sobre la conquista de Jalisco, pero en 1962 regresó a la Ciudad de México, donde comenzó a trabajar en el Instituto Nacional Indigenista (INI).

En 1964 fue estrenada la película "El gallo de oro" dirigida por Roberto Gavaldón, historia escrita por Rulfo, lo mismo que "La fórmula secreta" dirigida por Rubén Gámez.

El primer reconocimiento nacional de su labor lo obtuvo en 1970, cuando recibió el Premio Nacional de Literatura, y una década después, recibió un Homenaje Nacional en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.

Como parte de esta, en el mismo inmueble fue inaugurada una exposición con su obra fotográfica y presentado el libro-catálogo de la misma. De igual forma, se publicó "El gallo de oro".

Rulfo falleció el 7 de enero de 1986, no sin antes publicar su libro de fotografías llamado "Inframundo" (1981) y recibir en 1983, el Premio "Príncipe de Asturias".

Cronología

Nace el 16 de mayo en Sayula, Jalisco.

En 1945 publica los cuentos "Nos han dado la Tierra" y "Macario" en la revista Pan, de Guadalajara, dirigida por Antonio Alatorre y Juan Rulfo.

En 1946 se establece en México y se publica su cuento "Macario" en la revista América y en la misma, en febrero de 1948 "La cuesta de las Comadres," en enero, 1950 "Talpa" en diciembre, 1950 "El Llano en LLamas" y en agosto, 1951 ¡Díles que no me Maten!

En 1954 El Llano en Llamas se publica en la colección "Letras Mexicanas" de Fondo de Cultura Económica

En 1955 aparece Pedro Páramo e la colección "Letras Mexicanas," con una tirada de 2,000 ejemplares y se efectúa la primera reimpresión de El Llano en Llamas

La Antología de cuentos mexicanos 1954 (México, INIAL, 1955) reproduce "Un cuento".

Se estrena el cortometraje Talpa de Alfredo B. Cravenna, basado en el cuento de Rulfo de igual Título

Publica el cuento "El día del derrumbre."

En 1956 Se establece en Ciudad Alemán, Veracruz, trabajando como promotor de la Comisión Papaloapan, labor oficial sobre la organización del sistema de riego en dicha zona verucrazana.

Emilio el Indio Fernández le solicita guiones para cine. Rulfo trabaja en alguno de ellos e invita a Juan José Arreola a colaborar.

En 1958 se traduce Pedro Páramo al alemán.

En 1959 Pedro Páramo es traducido al inglés y al francés. Esta última incluye además tres cuentos de El Llano en Llamas.

En 1960 Pedro Páramo es traducido al sueco.

En 1961 Pedro Páramo es traducido al noruego y es nombrado el asesor literario del Centro Mexicano de Escritores, junto con José Arreola.

En 1962 Deja de trabajar para televicentro y Viaja a Alemania.

En 1963 Pedro Páramo aparece publicado en Italiano y edita el disco de larga duración Juan Rulfo con textos leidos por el autor, en la colección Voz viva de México.

En 1966 Pedro Páramo es traducido al polaco.

En 1967 El Llano en Llamas es traducido al francés y en inglés. En este mismo añ se filma la película Pedro Páramo.

En 1969 Pedro Páramo es traducido al portugués.

En 1970 El Llano en Llamas es reimpreso pero con importantes modificaciones, desaparece Paso del Norte y se incluyen otras dos El día del derrrumbe y La herencia de Matilde Arc´ngel, Pedro Páramo y El Llano en Llamas se traducen al ruso. Pedro Páramo se publica también en eslovaco.

En 1975 Aparecen en Alemania tres ediciones más de Pedro Páramo.

En 1976 Aparece en Alemania El Llano el Llamas.

En 1983 recibe en España el Premio Príncipe de Asturias.

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