ETA rompe la tregua y las detenciones de etarras se producen por doquier. Ahora, los Servicios de Seguridad mexicanos han detenido al presunto etarra Antonio Aspiazu Alcelay, reclamado por el Juzgado Central de Instrucción número cinco de la Audiencia Nacional y relacionado con la financiación de la banda terrorista.
Nacido en Azcoitia (Guipúzcoa) el 5 de octubre de 1968, Antonio Aspiazu residía en México de forma irregular y sobre él pesaba una Orden de Busca y Captura dictada el citado juzgado. La Guardia Civil buscaba a Aspiazu Alcelay en el marco de una investigación relacionada con la financiación del terrorismo.
Las autoridades mexicanas tienen previsto proceder a su inmediata expulsión hacia España. A su llegada a nuestro será conducido por la Guardia Civil hasta la Audiencia Nacional para ser puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción en funciones de guardia.
Antecedentes
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad investigan a Aspiazu desde 1991, cuando ya se tienen noticias de que pueda formar parte de un “comando de información” de la banda terrorista.
En agosto de 1993 fue detenido por la Policía Autonómica Vasca por alteración del orden público, tras la celebración de la Procesión de la Salve en San Sebastián. En septiembre de 1999 fue de nuevo detenido por la Ertzaintza por desórdenes públicos, en este caso tras la celebración de los actos de clausura del festival de cine, también en San Sebastián. Igualmente, se le considera involucrado en la explosión de un artefacto en Pamplona el 28 de diciembre de 1999.
Su detención en México ha sido consecuencia de una operación conjunta de la Guardia Civil y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), en el marco de una investigación sobre financiación del terrorismo, en la que también se ha recibido apoyo de Estados Unidos.