No gustó en la prensa su presentación como candidato
Contraofensiva mediática al lanzamiento electoral de Zapatero
lunes 26 de noviembre de 2007, 07:59h
"Pirómano", "apagafuegos", "ficticio y alejado de la realidad social", "carente de propuestas"... son algunas de las expresiones empleadas este lunes en los medios críticos con el Gobierno para definir el lanzamiento de Zapatero como candidato electoral. A pesar de ello, lo que más ha gustado es la apuesta por Solbes, muy bien vista desde los sectores económicos.
Zapatero fue proclamado el domingo candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno en un mitin celebrado en Fuenlabrada. Estuvo arropado por su mujer, el ex presidente Felipe González, los miembros de su Gabinete, la cúpula del PSOE y todos los presidentes autonómicos socialistas, excepto el catalán José Montilla.
En su intervención, confirmó su deseo de que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, continúe en el Gobierno si el PSOE gana las elecciones de marzo próximo. Y eso es lo que mejor se ha visto desde los medios un día después, sobre todo en la prensa económica.
En los editoriales de la prensa más crítica con su Gobierno, como en El Mundo, aBC y La Razón, se critica así su discurso.
El Mundo: DE PRESIDENTE PIRÓMANO A CANDIDATO ‘APAGAFUEGOS’
Zapatero se presentó ayer en el acto de su proclamación como candidato a la Presidencia del Gobierno como la personas adecuada para “acabar para siempre con la crispación política”. “Lo paradójico es que se compromete a dar solución a un problema que, en gran medida, él mismo se ha encargado de generar”. “Pero hay más: ¿Cómo va a traer ‘la convivencia y la tolerancia’ quien ha consentido que se cree un cordón sanitario para aislar a un partido que representa a más de 9 millones de españoles? Si en verdad quisiera hacerlo debería cambiar su política, y no es eso lo que anunció ayer en Fuenlabrada”.
“Seguramente el PP no ha sido la mejor oposición posible, pero lo que no puede pretender el presidente pirómano es disfrazarse de apagafuegos e intentar quedarse encima con las manos libres. Su objetivo es contar con una oposición desactivada por la crisis de una derrota contundente. Al solicitar una mayoría holgada para acabar ‘para siempre’ con la crispación, lo que revela es su intención de aplastar al PP e implantar su paz; una paz que convertiría el Parlamento en un cementerio político a costa de los intereses españoles”.
ABC: EL PSOE NO TIENE GANADAS LAS ELECCIONES PORQUE EL PP LE PISA LOS TALONES
Rodríguez Zapatero dedicó ayer el discurso de su proclamación como candidato a un mensaje central: “pedir votos para una reelección que no tiene asegurada. El resto de su alocución fue una sucesión de tópicos contra el partido Popular, sin la más mínima autocrítica y con la exhibición de una España tan idílica que resulta incomprensible que las encuestas no le den una ventaja ya irreversible”.
“Rodríguez Zapatero está incurriendo excesivamente en el error de confundir la ilusión con el ilusionismo y el resultado es la fabricación de un discurso cada día más ficticio y alejado de la realidad social (...)”. “El PSOE no tiene ganadas las elecciones porque el PP le pisa los talones. Rodríguez Zapatero no fue capaz ayer de plantear un programa de futuro con alguna propuesta concreta que desmienta la apariencia de que se ha quedado sin ideas para España”.
La Razón: LA AUTOCOMPLACENCIA EN EL BALANCE DE GOBIERNO ES LA BASE DEL PROYECTO ELECTORAL DEL PSOE
La designación de Zapatero como candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno se ciñó casi exclusivamente al objeto de la convocatoria: la exaltación del líder con algunos guiños al equipo en medio de una cuidada escenografía y con un guión destinado a redondear los perfiles de hombre real, cabeza de familia, acompañado por su esposa, jaleado por el ex presidente González y bien asistido por el partido. Nada que objetar, salvo que tanta elocuencia formal careció de propuestas, de mensajes de calado, de las necesarias dosis de precisión que requiere un discurso político si aspira a superar la mera comunicación interna del partido”. Sin embargo, Rajoy “compromete su palabra en un proyecto de reformas fiscales y otras medidas económicas diseñadas para afrontar la pérdida de poder adquisitivo, la inflación, la subida de tipos y la inestabilidad en el empleo”.