El líder del PP presentará el sábado su oferta de reforma constitucional
Rajoy se compromete a pactar con la oposición la política exterior si gana en marzo
lunes 26 de noviembre de 2007, 17:58h
Mariano Rajoy decidió ser él quien compareciera en rueda de prensa tras la reunión del Comité Ejecutivo del PP y no Ángel Acebes, como es habitual, para continuar dando algunas ‘pinceladas’ de lo que será su Programa Electoral para las elecciones generales de 2008.
El líder del PP, además de presentar las principales medidas recogidas en el Programa Político que incluye una novedosa y atractiva reforma del Estatuto de los Trabajadores para “adaptarlo a la realidad social y económica actual”, prometió que si gana en marzo se someterá a una interpelación mensual en el pleno Congreso y que consensuará la política exterior con el principal partido de la oposición, a cuyo líder recibirá con frecuencia en La Moncloa.
En el PP se han propuesto que no haya una sola semana en la que Rajoy no adelante alguna oferta o adquiera un nuevo compromiso con sus hipotéticos electores, - en una especie de revival del ‘puedo prometer y prometo’ de Adolfo Suárez-, una actitud que en Génova contraponen a la ‘escasez’ de ideas de José Luis Rodríguez Zapatero, a quien critican por no haber realizado “ni una sola propuesta interesante” en el acto de proclamación de su candidatura celebrado el domingo pasado en Fuenlabrada.
Para los populares ha quedado claro que mientras Zapatero y el PSOE trabajan únicamente en una dirección, “para frenar al PP”, su líder lo hace para “mejorar la calidad de vida de los españoles”, para que éstos “vivan más tranquilos y aumente el estado de bienestar”.
Por ello, Rajoy se centró este lunes, en el que compareció en lugar de Acebes muy relajado y sonriente, -como quiere demostrar que es su estado de ánimo últimamente-, en lanzar una serie de compromisos y ofertas que podrá en práctica a partir de marzo si gana las elecciones generales, objetivo que, según las encuestas que manejan en Génova, lo tienen al alcance de la mano.
Para empezar, anunció su compromiso de someterse una vez al mes en el Congreso a una interpelación de la oposición con unos márgenes de tiempo mucho más amplios que los actuales, que están establecidos ahora en cinco minutos. Esta medida estaba incluida en la reforma del Reglamento del Congreso que no ha podido aprobarse por falta de consenso entre los grupos parlamentarios, principalmente PSOE y PP. Rajoy aseguró que no necesitará que se reformen las reglas parlamentarias para aplicar esta medida porque se trata de un compromiso ‘’voluntario’ que adquiere.
Precisamente la palabra consenso es la que más repitió Rajoy en su comparecencia ante los medios de comunicación. Una palabra a la que le ha cogido gusto el líder del PP y que intentará que sea la ‘guia’ de toda su política si en el futuro es el presidente del Gobierno.
Después de desvelar que Zapatero “jamás” le ha llamado para hablar de la crisis abierta con Venezuela, o para tratar temas importantes de las relaciones de España con otros países, Rajoy se comprometió a no hacer lo mismo y a consensuar todos los aspectos estratégicos de la política exterior con el jefe de la oposición, algo que aunque jamás hizo José María Aznar, él si está dispuesto a hacer. Es más, el líder del PP también prometió que recibirá a Zapatero – si éste pierde- en la Moncloa periódicamente para hablar de estos asuntos además de celebrar un debate monográfico anual en el Congreso, al margen del que ya existe sobre política general.
Rajoy, que presentará el próximo sábado su propuesta de reforma constitucional, incidió en lo difícil que resulta ahora cerrar acuerdos sobre asuntos de Estado con Zapatero y un PSOE que no se parece en nada al que lideraba Felipe González. Tanto insistió sobre el ‘talante’ del ex presidente del Gobierno del PSOE y los dirigentes de entonces que tuvo que aclarar, tras ser interpelado sobre este punto en diversas ocasiones, “a ver si va a parecer ahora que soy un hincha del señor González!”.
El presidente del PP avanzó, además, que propondrá una reforma del Estatuto de los Trabajadores “para adaptarlo a la realidad social y económica”, con el objetivo de conseguir “trabajo más flexible – incluso desde casa- y una mejor conciliación de la vida laboral y personal”. La reforma garantizaría la formación a lo largo de la toda la vida y la calidad en el entorno laboral.
Asimismo, Rajoy aseguró que promoverá la creación de un grupo de expertos para reformar la Ley Electoral para que se garantice, entre otras cosas, que el cabeza de lista del partido más votado se convierta autonmáticamente en alcalde en las elecciones municipales.
El Programa Político del PP incluye también un nuevo Plan Nacional para alcanzar la plena penetración de las tecnologías de la información, así como el establecimiento de incentivos tanto en el IRPF como en el Impuesto de Sociedades para desarrollar las patentes.
Sobre listas no quiso adelantar nada, remitiéndose como siempre al mes de enero que será cuando comiencen a desvelarse las candidaturas, pero sí ironizó sobre los ‘pesos pesado, los ministros que Zapatero ha ido colocando en circunscripciones difíciles para conseguir más escaños. “Hay más plumas que pesos pesados”, contestó, provocando la risa de los informadores.