El periodista especializado en fichajes Fabrizio Romano ha asegurado este jueves en sus redes sociales que Nico Williams y el FC Barcelona han alcanzado un acuerdo en lo personal para un contrato de 6 años, hasta junio de 2031.
Según su información, el extremo internacional percibiría entre 7 y 8 millones de euros netos por temporada y la entidad culé pagaría los 58 millones de euros de la cláusula de rescisión (más alrededor de 4 en impuestos) en una fecha todavía por determinar.
Romano no especifica que haya acuerdo entre clubes, y de hecho, el propio Athletic Club no ha confirmado ninguna oferta formal por el jugador.
Mientras tanto, desde Ibaigane se mantiene el plan de renovación. Fuentes cercanas al club bilbaíno confirman que la entidad busca ofrecer a Nico Williams una mejora contractual significativa, que incluya una cláusula de rescisión más alta que los 60 millones actuales, con el objetivo de frenar el interés de clubes como el Barça, Bayern o el Chelsea.
El Athletic confía en que su proyecto deportivo, reforzado con la clasificación a Champions y la buena sintonía entre Nico e Iñaki Williams, pueda pesar en la decisión final del jugador. No se descarta que la propuesta bilbaína esté ya en manos del entorno del futbolista.
Sin acuerdo entre clubes: la clave sigue en Lezama
Por el momento, no hay acuerdo económico entre el FC Barcelona y el Athletic Club. La cláusula es la vía más rápida, pero en el contexto actual del fair play financiero del Barça, ejecutar ese pago de forma directa se antoja complicado.
Medios catalanes apuntan a que el club azulgrana debe resolver primero sus limitaciones presupuestarias antes de formalizar cualquier operación. Mientras tanto, el Athletic gana tiempo para seguir negociando directamente con el jugador.
El entorno de Nico guarda silencio y el mercado sigue abierto
Nico Williams no ha hecho declaraciones públicas sobre su futuro. Su entorno guarda silencio mientras el jugador sigue concentrado con la selección.
Desde el club rojiblanco se interpreta el movimiento del Barça como parte de las maniobras habituales del mercado estival, y no se da por perdido al futbolista.
El Athletic, por tanto, aún juega sus cartas. Su prioridad es lograr que Nico amplíe su contrato y frene el interés externo, en un movimiento que sería clave para consolidar el bloque ofensivo del equipo de cara a la próxima temporada en Europa.
Segunda intentona
El fichaje del jugador navarro por el Barça llegaría un año después de aquel 'no' que molestó en la cúpula directiva azulgrana.
El verano pasado, tras ganar la Eurocopa, la entidad blaugrana le indicó al jugador que estaba dispuesta a pagar la cláusula, pero finalmente Nico rechazó la oferta y decidió seguir en el Athletic una temporada más.
Su gran amistad con Lamine Yamal ha sido un aspecto clave. El año pasado no sirvió para convencerle, pero parece que sí en este.
Además, Williams se ha visto algo estancado esta temporada -solamente ha firmado 5 goles en Liga- pese a la buena temporada del Athletic, 4 clasificado en la competición doméstica y uno en la semifinal de la Europa League.
Sobre la mesa, también hay otras suculentas ofertas del Bayern y de más equipos de la Premier League que no han acabado de convencer al futbolista: él desea jugar en el FC Barcelona.
Y todo pese a que Joan Laporta era reacio a su fichaje, por pensar que el tren del Barça ya había pasado y el futbolista fue el que decidió no cogerlo, pero la insistencia del deportista y las ganas de vestir la elástica azulgrana han convencido tanto al presidente del club como a la dirección deportiva.
Deco viajó este miércoles a Ibiza, donde el futbolista está de vacaciones, para terminar de apalabrar el acuerdo.
Ahora, falta ver cuándo se realiza el pago de la cláusula, los 62 millones incluido impuestos, una cifra que se considera una oportunidad de mercado para un jugador todavía jovencísimo: cumplirá los 23 años el mes que viene.
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