El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ironiza con que Pedro Sánchez diga que se volverá a presentar a las elecciones:
"Creo que el señor Sánchez, que tiene muchos socios internacionales, podría consultar con ellos para que se presente de forma indefinida y que intente ser presidente del Gobierno en los próximos 20 años".
Para añadir después: "El señor Sánchez no se da cuenta de que los españoles no le resistirían en el año 2030 porque ya no le quieren en 2026".
"Si el señor Sánchez quisiera convocar las elecciones el próximo domingo, los españoles le dirían 'váyase' "Si los españoles queremos que se vaya en el año 2026, no creo que haya españoles que quieran que esté en 2030", insiste.
A su vez, considera que "Sánchez necesita el aparato del Estado para defenderse de los problemas judiciales que tiene en casa, en su Gobierno y en su partido".
Y recuerda que Begoña Gómez, la esposa del presidente del Gobierno, está siendo "investigada de forma multirreincidente" por 5 delitos (malversación, corrupción en los negocios, tráfico de influencias, intrusismo profesional y apropiación indebida) y por uno de ellos, de acuerdo a las leyes procesales de nuestro país, el juez ha defendido remitirlo a un jurado popular.
Subraya que la situación en la que se encuentra Sánchez, con su mujer "a punto de sentarse en el banquillo delante de un jurado popular", es "inadmisible en la Europa democrática a la que pertenecemos".
Un Gobierno fallido
Incide en que "España tiene que pasar página del colapso que ha provocado el sanchismo y señala que ya no hay cortina de humo capaz de tapar que estamos ante un Gobierno fallido".
Acusa al Gobierno de convertir todo en un "lodazal" de juicios abiertos en el entorno de Sánchez, de corrupción sistemática, de descrédito institucional, de servicios públicos colapsados y de abandono de las políticas del Estado:
"Es muy difícil poder ocuparse de los problemas de los ciudadanos cuando lo único que preocupa al Gobierno es ocuparse de su agenda judicial".
Considera que el escándalo de las pulseras antimaltrato ha vuelto a demostrar "la negligencia, la incapacidad y la falta de sensibilidad" del Gobierno con las mujeres y con las víctimas.
Asegura que el PP devolverá la seguridad, la convivencia y la prosperidad a nuestro país y, cuando se celebren elecciones, "llegaremos al Gobierno para implementar soluciones porque estamos preparados".
"Sánchez ha convertido la inmigración en un problema"
El líder del PP cree que los inmigrantes son los primeros interesados en la tolerancia cero contra los delitos: "Quien venga a aportar será bienvenido y quien venga a delinquir será expulsado".
Arguye que Sánchez ha convertido la inmigración en un problema y "quien lo ha provocado ya no puede solucionarlo". "En este asunto, como en tantos otros, PSOE y Vox están practicando un bipartidismo irresponsable", señala.
Critica al Gobierno por practicar una política abiertamente "racista, insolidaria y desleal" por repartir a los inmigrantes que llegan de forma irregular solo entre las comunidades autónomas del PP.
Avanza que la inmigración será un asunto clave en la reunión con presidentes autonómicos que se celebrará este fin de semana en Murcia y adelanta que el PP presentará dentro de unas semanas un plan completo para hacer frente a la política migratoria.
Destaca que ese plan se regirá por 5 principios:
- No hay política más inhumana que la que no existe;
- Tenemos derecho a elegir quién entra, cómo y para qué;
- Quien venga a aportar será bienvenido, pero quien venga a delinquir será expulsado;
- Los inmigrantes deben aspirar a la suficiencia económica;
- Y la inmigración que llega a España tiene que ser, de forma preferente, culturalmente cercana.
Califica de "una inmoralidad" el efecto llamada del presidente del Gobierno porque conlleva arriesgar vidas humanas, fomentar las mafias y generar desorden:
"Sánchez es el único político europeo que sigue diciendo que a su país puede llegar cualquiera y quedarse todos".
Subraya que "la desidia y la irresponsabilidad" del Gobierno de Sánchez en su política migratoria ha provocado que ya los españoles la consideren uno de los mayores problemas del país.
Aboga por reforzar la seguridad de las fronteras, planificar las llegadas de inmigrantes, según las necesidades económicas y sociales, y vincular la entrada a un contrato de trabajo.
"Los migrantes deben aspirar a la suficiencia económica. Los subsidios no pueden convertirse en un modo de vida", recalca.
"No nos podemos permitir mantener tasas de paro y precariedad más elevadas que las de la población nacional de manera estructural y permanente", explica.
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