Con la inminente promulgación de la ley de amnistía, el ambiente jurídico se está caldeando igual e incluso más que el político.
Ayer el presidente interino del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) aceptó la convocatoria de un pleno urgente el próximo lunes a petición de los 8 vocales conservadores (nombrados por el PP).
Los 8 magistrados abogan porque el Consejo emita una declaración institucional sobre el asunto de la amnistía. Al mismo tiempo la asociación mayoritaria de jueces, la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), de corte conservador, emitió un comunicado cargando de forma contundente contra la amnistía.
Tras ello le ha tocado el turno a los jueces de corte más progresista. La asociación de Jueces y Juezas por la Democracia, la tercera con más inscritos de la judicatura, ha criticado las intenciones de los 8 vocales conservadores del CGPJ y les ha acusado de "embarrar" la judicatura.
Resaltan que el CGPJ no tiene competencia
Al contrario que los magistrados de la APM, los jueces progresistas no se han entrometido en criticar o apoyar la ley de amnistía, sino que han cargado contra la propuesta de los 8 vocales del CGPJ.
Les han acusado de "servilismo" y les han recordado que "no tienen competencia" para informar sobre proyectos o proposiciones de ley, en referencia a la futura ley de amnistía.
Han considerado que emitir esa resolución sería involucrar el gremio en una "confrontación partidista".
Insisten en que emitir la declaración institucional que proponen sería un "abuso de las atribuciones legales" del CGPJ y supondría una "desviación de la legítima función" de dicho órgano judicial.
"Sus afirmaciones invaden la exclusiva función del juicio de constitucionalidad que sólo al Tribunal Constitucional corresponde, al ser el supremo intérprete de ésta", han recordado.
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