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Podemos afronta la investidura de Sánchez como una semana perdida antes de volver a negociar

> La formación de Pablo Iglesias descarta su abstención y mantiene la oferta de un Gobierno de izquierdas

lunes 29 de febrero de 2016, 10:04h
Podemos ha vuelto a rechazar los últimos gestos del PSOE para conseguir su abstención ante la votación de investidura de Pedro Sánchez. La formación liderada por Pablo Iglesias considera que esta semana constituirá un tiempo perdido y que la investidura será "un teatro". Estas han sido las palabras de la portavoz adjunta Irene Montero, que ha vuelto a insistir en que ellos votarán 'no' en las dos votaciones previstas en los próximos días. Podemos ya piensa en el plazo que se abriría a continuación y confirma su voluntad de volver a sentarse, pero sólo para hablar de la oferta de un Gobierno de coalición entre las fuerzas de izquierda.
Puño en alto de Pablo Iglesias en el Congreso
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Puño en alto de Pablo Iglesias en el Congreso (Foto: Podemos)

Un doble 'no' a Pedro Sánchez. La portavoz adjunta de Podemos en el Congreso, Irene Montero, ha vuelto a descartar la posibilidad de que se abstengan para facilitar la investidura del candidato socialista cuando apenas quedan 24 horas para que comience el debate.

"Ni el chantaje ni ningún tipo de práctica que se base en un acuerdo como el que han alcanzado PSOE y Ciudadanos va a contar con nosotros", ha comentado Montero en una entrevista en la cadena 'Cope'.

La portavoz ha declarado que la investidura de Sánchez será previsiblemente un "teatro", ya que, a pesar del apoyo de Ciudadanos y de Coalición Canaria, sólo sumaría 131 escaños. De esta manera, Montero ha dado por hecho, no sólo el voto negativo de los 65 diputados de la formación morada, sino también el de los 123 escaños del PP.

La formación morada ya había destacado que afrontaban este debate de investidura como una "semana perdida" antes de contemplar volver a sentarse a la mesa de la que se levantaron tras la firma del acuerdo entre PSOE y Ciudadanos.

¿Y después qué? Irene Montero ha asegurado que ellos no van a variar su oferta al PSOE y que van a insistir en un Gobierno de coalición liderado por Sánchez y en el que esté también Podemos -con Iglesias de vicepresidente-, Compromís y Unidad Popular-IU.

Según Montero, la petición de entrar en el Ejecutivo de Sánchez es más una "consecuencia" de los resultados electorales, puesto que ningún partido consiguió mayoría absoluta y la diferencia de votos entre el PSOE y Podemos es de unos 300.000 votos.

"Tenemos el mismo plan desde el principio. Que el PSOE rectifique y nos volvemos a sentar a negociar. La llave la tiene el PSOE", ha comentado Montero.

Sin embargo, la portavoz ha evitado detallar si pedirían explícitamente a los socialistas que rompieran el acuerdo con Ciudadanos antes de volver a la mesa de negociaciones.

Por otra parte, Montero ha desvelado que en las poco más de 48 horas que duró la negociación entre socialistas y Podemos, los principales escollos fueron en materia económica, en parte porque fue el primer eje tratado.

La formación morada ha dejado claro que considera que el PSOE ha claudicado gran parte de su programa económico para acordar con Ciudadanos y que incluso ha incumplido algunas de sus promesas de campaña, como la de derogar toda la reforma laboral.

Aunque Montero ha manifestado que les daba igual que el PSOE hablara con la formación de Albert Rivera, hubo un momento en el que Podemos exigió a Sánchez que rompiera las negociaciones con Ciudadanos para comenzar el diálogo con ellos. En este sentido, Podemos tuvo que ceder ante la intermediación de Alberto Garzón y aceptó reunirse con el equipo negociador socialista, a pesar de que estos habían constatado avances con la formación naranja.

Según han revelado luego los representantes de Podemos, ellos pensaban que el PSOE aceptaría medidas puntuales de Ciudadanos, como por ejemplo en materia de regeneración democrática, y que el resto del acuerdo correspondería más al programa socialista.


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Podemos afronta la investidura de Sánchez como una semana perdida antes de volver a negociar
(Foto: Dani Gago/Podemos)
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