El presidente en funciones del CGPJ carga abiertamente contra la amnistía

Vicente Guilarte asumió el pasado mes de julio la presidencia interina del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y ayer se despidió oficialmente de la que ha sido su casa durante casi 5 décadas, la Universidad de Valladolid.

En la apertura del curso de los nuevos estudiantes de Derecho intervino con un discurso para darles la bienvenida y despedirse de la mencionada Universidad.

En él alertó de los "ilusionistas" del Derecho que, según su criterio, aparecerán en torno al asunto de la amnistía.

"Los ilusionistas del derecho van a aparecer de nuevo con sus arbitrios mágicos para convencernos de la bondad constitucional de la amnistía que, a mi juicio, los más prudentes cuestionan", avisó.

Guilarte señaló que "es muy difícil" estar de acuerdo con la amnistía jurídicamente hablando y resaltó que lo prudente es cuestionarla a priori, pero se negó a debatir más sobre el asunto ya que no era el lugar adecuado y señaló que ya habrá tiempo de comentar dichas cuestiones y tendrá que esperar a ver cómo evoluciona "para opinar".

La ley es un instrumento "poderoso"

Recordó a los alumnos que no tienen que olvidar que la ley "es un instrumento poderoso" y que puede resultar "enormemente nocivo" si se utiliza "desviadamente".

El presidente interino del CGPJ ofreció estas pinceladas de su visión sobre la amnistía y habló también, por encima, del caso Rubiales. En su opinión, todo el escándalo del asunto ha sido un "delirio hermenéutico" sobre un "factum sencillo".

Subrayó que en estos tiempos el mundo de la abogacía es "difícil" ya que hay una competencia "feroz" y señaló que en ocasiones los postulados deontológicos "se desprecian".

Guilarte se ha despedido así de sus actividades docentes y de sus actividades privadas como abogado tal y como le habían requerido varios vocales del CGPJ tras aceptar en verano la presidencia interina.

Una presidencia interina de un órgano que sigue en conflicto, pues lleva ya 5 años de bloqueo en su renovación y sigue sin haber visos de acuerdo entre PP y PSOE para su renovación a corto plazo.