Rectores de la universidades madrileñas indignados por el ranking de universidades del CES

El ranking de universidades se publicó hace un mes y ha sido elaborado por el Instituto de Análisis Industrial y Financiero de la Universidad Complutense de Madrid encargado por el Consejo Económico y Social de Madrid (CES). En el informe se evalúa la docencia e investigación de 69 universidades presenciales de España.

La universidad que encabeza el ranking es una privada, la Universidad de Navarra, seguida de las de Tarragona, Córdoba y Oviedo. El estudio analiza 32 variables agrupadas en 10 factores: recursos humanos, medios informáticos, libros por alumno, tesis, patentes, proyectos de I+D entre otros. La mayoría de los datos, recogidos en el curso 2006-2007, han sido facilitados por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).

El ranking ha levantado ampollas entre los rectores universitarios madrileños y en el comunicado de denuncia que envían a Esperanza Aguirre afirman que el estudio toma como variable más importante para juzgar la calidad de las universidades el tamaño relativo de cada universidad medido en relación a su provincia. Esto explica la mala clasificación de las universidades de Madrid ( la Complutense alcanzó el puesto 26 y la Politécnica el 27) y también, en menor medida, de las de Barcelona.

Los primeros puestos del ranking son para aquella universidades relativamente grandes con relación a la población de su provincia. Este hecho, "obvio para cualquier estadístico competente que analice este estudio", según explican los rectores, ha pasado inadvertido para los autores del ranking y también para los evaluadores de los estudios que encarga el CES. Además afirman que difundir "unos falsos resultados negativos para las universidades de Madrid y que sugieren políticas equivocadas hace un daño grave al prestigio de nuestras instituciones". Según la carta de denuncia el CES avala que la forma más eficaz de aumentar la calidad de las universidades de la Comunidad es asignar más recursos para contratar el máximo número posible de profesores y personal de administración y servicios y dar incentivos a los madrileños para que fijen su residencia en provincias vecinas.

Los rectores denuncian que en el ranking no se han cumplido los mínimos controles de calidad y ha causado un grave daño al prestigio de las Universidades Públicas de Madrid. Por su parte los creadores del estudio aseguran que varias universidades no han portado suficientes datos y que estos estudios servirán para que un futuro haya más transparencia.