Las Pruebas de Evaluación de Diagnóstico que realiza cada año la Consejería de Educación vuelven a mostrar las carencias educativas del alumnado andaluz, cuyo fracaso escolar se sitúa en el 34%. Los datos reflejan una preocupante bajada, con la excepción de las matemáticas de Primaria, en todos los niveles de competencia, siendo especialmente alarmante en el caso de comunicación lingüística, que evidencia carencias en los alumnos en comprensión escrita y lectora, y en expresión oral y escrita.
Así, estas pruebas evalúan el nivel de competencia, que no de conocimientos, de los alumnos, que se cuantifica de 1 a 6 (el 3,5 equivaldría al aprobado) y se realizan a comienzo de quinto de Primaria y tercero de ESO. El 27% de los alumnos andaluces está en los niveles de 1 ó 2, mientras que el 23% se encuentran en el 3, esto significa que la mitad de ellos suspende.
La única mejora en el nivel de competencia de los alumnos andaluces ha sido en matemáticas de Primaria, que ha ido mejorando progresivamente en 2006 (3,43), 2007 (3,71) y 2008 (4,08). En cambio, en Secundaria los resultados son peores que el año anterior, pasando del 3,65 de 2007 al 3,05 de 2008.
La comunicación lingüística también baja. Así en Primaria ha ido cayendo desde el 4,45 de 2006, al 3,87 de 2007 y al 3,6 de 2008; en Secundaria ha pasado del 3,81 de 2007 al 3,28 de 2008. Como dato curioso las niñas tienen un mayor nivel en lengua y los niños en matemáticas.
Con estos datos, no es extraño que la consejera de Educación, Mar Moreno, afirme que «la comprensión oral y escrita» es lo que más preocupa a su departamento, por razones tan evidentes como que «si no se domina la lengua perjudica al resultado de la competencia matemática».
La consejera de Educación reconoció que aunque un 50% de los alumnos se sitúan en los niveles superiores de competencias (4, 5 y 6), los resultados no son de su satisfacción y señalan la necesidad de "remangarse" para mejorarlos, una labor en la que apeló a la implicación no sólo de la administración y los profesores sino también de las familias. En este sentido, los resultados demuestran que a mayor nivel socieducativo de los padres e incentivación por la lectura, mejor nivel de competencia. El consejo rector de la agencia conoció los resultados de esta tercera ola de las pruebas que a partir del próximo curso abandonarán su condición experimental y pasarán a ejecutarse de forma obligatoria. Para fomentar estas disciplinas, Moreno insistió en la implicación "de todos, Junta, centros y padres",
Estas pruebas, además, están muy cuestionadas por asociaciones como Apia, como comenta su portavoz Gonzalo Guijarro, por su bajo nivel de exigencia, valorar sólo la aplicación práctica de los conocimientos del alumno e ignorar contenidos de los programas oficiales —en matemáticas no se plantean problemas de ecuaciones y en lengua queda literatura—. Por ello, consideran que la Consejería trata con estas evaluaciones «ocultar la realidad», ya que «a los alumnos de secundaria les ponen ejercicios que cualquier analfabeto funcional podría responder».
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