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La NASA habla español

viernes 07 de agosto de 2009, 17:45h
¿Hay vida más allá de la Tierra? ¿Hubo agua en Marte? Estas y algunas otras cuestiones son las que tratan de averiguar los satélites cuyas trayectorias se siguen desde centros espaciales como el que existe en Robledo de Chavela.
Robledo de Chavela, a 63 kilómetros al sureste de la capital, esconde un complejo espacial único no sólo en España, sino en toda Europa. Y es que su término municipal alberga el Madrid Deep Space Communication Complex, o lo que es lo mismo, Complejo de Comunicaciones con el Espacio Profundo de Madrid, una infraestructura de la NASA.

"Nuestra principal función es seguir a los satélites que están alejados de la Tierra explorando el Sistema Solar", explica a Madridiario el director de la base, Pablo Pérez-Zapardiel. Desde esta estación se siguen unos 40 satélites, entre los que destacan -por su repercusión mediática- los que trabajan en Marte o las misiones en la Luna.

En todo el mundo, tan sólo otras dos ciudades más cuentan con una infraestructura de la NASA como la de Robledo: una está en Goldstone (EE.UU.) y otra en Camberra (Australia). "Para nosotros es importantísimo tener la estación en nuestro término municipal. Forma parte de nuestra historia y nos ha dado a conocer a nivel mundial", indica orgulloso el alcalde de Robledo de Chavela, Mario de la Fuente.

Y es que esta estación fue la que recibió el primer sonido de Marte y también las primeras imágenes de la Luna. Todo esto ha hecho que Robledo, que tiene una población de unos 4.000 habitantes, sea conocido más allá de nuestras fronteras.

En 1964, los gobiernos de EE.UU. y España firmaron un acuerdo para instalar una base en Robledo. "Se eligió esta ubicación porque se busscaba un sitio cercano a una gran ciudad, con suficiente personal cualificado y Madrid era el sitio idóneo. Además, Robledo de Chavela está en un valle aislado del ruido eléctrico de la gran ciudad", advierte Pablo Pérez-Zapardiel.

El trabajo en la estación
Cada estación cubre 120 grados, con lo que los satélites siempre son visibles desde la Tierra. Todas ellas forman parte de la red de espacio lejano de NASA, dependientes de la Jet Propulsion Laboratory en Pasadena (EE.UU). "Tenemos las tres el mismo cometido. Dependiendo de la rotación de la Tierra, recibirá las señales de los satélites uno u otro complejo", asegura el director.

Cada una de estas estaciones está en permanente comunicación con los satélites, de los que reciben información y a los que se les transmiten también órdenes. Los datos recogidos no se estudian en las estaciones, sino que una vez digitalizados se envían a Pasadena por fibra óptica.

El complejo de Robledo, con una superficie de 50 hectáreas propiedad del Ayuntamiento, dispone de seis enormes antenas, de las que están en pleno funcionamiento cuatro. Una de ellas tiene un diámetro de 70 metros, tantos como el de una plaza de toros, y las otras tres miden 34 metros.

Las otras dos ya no se emplean para el seguimiento de los satélites. Una de éstas, la primera que se construyó en el recinto, se ha reconvertido en radio telescopio y se usa en el programa educativo PARTNER, dirigido a fomentar entre los jóvenes el interés por la astronomía. Otra de las antenas en desuso procede de la estación espacial que había en Fresnedilla de la Oliva y que hizo el seguimiento de la llegada del hombre a la Luna.

En un futuro cercano la gran antena de 70 metros será sustituida por otras cuatro más pequeñas pero que son igual de eficientes y menos costosas de mantener. Además, no se descarta establecer otras antenas pequeñas que son  más fáciles de mantener.

Centro de visitantes
Junto al complejo, se encuentra el Centro de Visitantes, una especie de museo donde aprender sobre las tareas que se llevan a cabo en la estación. Así es posible ver desde una maqueta a tamaño real de un vehículo que se utilizó para explorar Marte hasta el mono de trabajo usado por el astronauta Miguel López Alegría en una misión.

"Sin duda lo que más llama la atención a los niños que nos visitan es el mono, que fue donado por Miguel López Alegría", explica María Vara, una de las encargadas de atender a los visitantes. El centro está abierto de martes a domingo de 10.00 a 15.00 horas.

Entre semana, está abierto para visitas concertadas de colegios e institutos. Mientras que el fin de semana está abierto a todo el público de manera gratuita. "Con los centros educativos se hacen diferentes talleres de astronomía, sobre el sistema solar, antenas o cohetes", añade María Vara.

Para dar a conocer este Centro de Visitantes, el Consorcio Turístico de la Sierra Oeste está trabajando en unas rutas por la zona con temática espacial que comprendería la visita del complejo de Robledo, así como las instalaciones de la Agencia Europea del Espacio en Villafranca del Castillo y las de Fresnedilla de la Oliva (que ahora pertenecen al CNI).
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