El presidente de Paradores intervino en la ‘cupula de Barceló’ de la ONU
martes 29 de junio de 2010, 18:15h
Este martes concluyen en la sede de la ONU en Ginebra (Suiza), las Jornadas Gastronómicas bautizadas como ‘Paradores y su cocina tradicional española en Naciones Unidas’. Unas jornadas con las que la Representación Permanente de España ante las Organizaciones Internacionales ha querido celebrar el fin del semestre de Presidencia Europea.
Las jornadas comenzaron el pasado lunes, día 21, y ya han permitido a más de 12.000 personas disfrutar de platos típicamente españoles. El éxito de esta muestra de cocina tradicional ha ido creciendo con el paso de los días. En la cafetería/comedor han sido frecuentes las colas para poder disfrutar de la muestra gastronómica mientras que en el restaurante de delegados ha sido casi imposible reservar una mesa con menos de 72 horas de antelación.
Paradores: un modelo puramente español, un modelo de éxito mundial
En este marco es en el que Miguel Martínez, presidente de Paradores, ofreció la pasada noche una Conferencia en lugar privilegiado: la sala de los Derechos Humanos conocida mundialmente por ser el símbolo de la ONU en Europa y también por su magnífica cúpula decorada por el artista español Miquel Barceló.
El acto comenzó con unas breves palabras a cargo del máximo responsable de Naciones Unidas en Europa. Sergei A. Ordzhonikidze, Director General de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra, quiso estar presente en esta presentación del modelo turístico que representa Paradores. A continuación, le llegó el turno al Embajador Representante Permanente de España ante las Organizaciones Internacionales, Javier Garrigues que fue el encargado de presentar la Conferencia del presidente de Paradores.
Miguel Martínez inició su intervención agradeciendo, precisamente, la invitación de Javier Garrigues y su empeño por organizar estas jornadas sobre la gastronomía tradicional española de Paradores.
El presidente de la cadena pública hotelera entró en materia recordando los logros de un modelo que nació en 1928, fecha en que el Rey Alfonso XIII inauguró el primer Parador en la Sierra de Gredos: “82 años después, Paradores es una empresa rentable que, con los ingresos que obtiene de sus clientes, persigue tres objetivos fundamentales: preservar y restaurar el patrimonio histórico artístico español; ser la imagen de España y de su turismo dentro y fuera de nuestras fronteras. Buscando, en todo momento, atraer un mayor número de turistas nacionales y extranjeros a nuestro país. Y en tercer lugar constituir una fuente de riqueza y empleo para las ciudades y regiones en que se ubican nuestros establecimientos”.
Martínez también hizo hincapié en los beneficios que genera la apertura de un nuevo parador en la región en que se ubica: “Paradores cumple un objetivo de creación de empleo y riqueza. Cuando se abre uno de nuestros hoteles en una zona turísticamente poco desarrollada, provoca inmediatamente un incremento de turistas. Y por ello, muy pronto, comienzan a abrirse nuevos negocios que crecen a la sombra del parador. Los paradores son, por tanto, una fuente de riqueza y de generación de empleo directo e indirecto incluso en tiempos de crisis”. De hecho, Martínez anunció que “en un momento en que, debido a la crisis económica mundial, el sector turístico está perdiendo empleo, Paradores no sólo ha mantenido su plantilla de más de 4.500 profesionales. Sino que también ha creado cerca de 350 nuevos puestos de trabajo. En su inmensa mayoría de carácter indefinido”.
Ante un auditorio compuesto por diplomáticos, empresarios turísticos y miembros de la colonia española en Ginebra, Martínez incidió en que el Modelo Paradores se corresponde con la actual política turística que desarrolla el Gobierno español: “desde hace varios años, España está incorporando a su oferta inicial de sol y playa, la de los valores que nos hacen únicos e inimitables. Y entre esos valores destaca sobre todo nuestro Patrimonio Histórico-Artístico. El Patrimonio es, por tanto, una fuente de riqueza cultural y un legado histórico que debemos preservar. Pero también es un reclamo turístico y una herramienta de desarrollo de primerísimo nivel. En nuestro caso, en el caso de Paradores es además una fuente de ingresos que se reinvierten íntegramente en la conservación y restauración de los edificios históricos”. Como conclusión, el presidente de Paradores afirmó que “el país que no apueste por un modelo de turismo cultural, sostenible y respetuoso con el medio ambiente perderá el tren del futuro”.
Martínez explicó también otras tareas que desarrolla Paradores como son la promoción de la gastronomía tradicional española y de sus distintas regiones; y el fomento de la cultura a través de labores de mecenazgo. En este último punto destacó algunas acciones de apoyo a la cultura como es la cesión de espacios monumentales a artistas jóvenes españoles para que exhiban sus pinturas, esculturas o puedan realizar sus conciertos.
La necesidad de seguir evolucionando
Pese al éxito del modelo, Miguel Martínez destacó la importancia de evolucionar a la misma velocidad que cambian los gustos del viajero del Siglo XXI. Por ello, el presidente de Paradores defendió los objetivos de Modernización e Innovación que se ha fijado la empresa en su Plan Estratégico 2009-12.
Martínez desglosó algunas de las iniciativas de este Plan como la inversión de 169 millones de euros para modernizar un total de 19 Paradores, el giro en la política comercial de la empresa y la firme apuesta por multiplicar su presencia en Internet.
Martínez concluyó su intervención defendiendo los motivos por los que se puede afirmar que Paradores es mucho más que una empresa hotelera: “es la imagen, el icono del turismo de un país, España, dentro y fuera de sus fronteras. Es una entidad que preserva, restaura y pone en valor el Patrimonio Histórico y Artístico de nuestro país. Y es una institución que potencia la cultura, el arte y la gastronomía de las distintas regiones de España. Por esa razón es una cadena única. Y por esa razón naciones de los cinco continentes están interesadas en importar el modelo de Paradores”.
Paella y cordero castellano en la Torre de Babel
Para conquistar los variadísimos paladares que se dan cita en el Cuartel General de la ONU en Ginebra, Paradores ha elaborado platos tradicionales con los mejores productos y ha combinado la gastronomía clásica con la demanda más vanguardista. Los responsables del éxito han sido los jefes de cocina de los paradores de Málaga Gibralfaro, Bartolomé Rodrigo; de Granada, Juan Francisco Castro Cervilla; y de El Saler, Bruno Fraga Pérez. Todos ellos coordinados por uno de los más veteranos y notables expertos en gastronomía de Paradores: Benito Ortiz.
La muestra ‘Paradores y su cocina tradicional española en Naciones Unidas’ ha puesto a disposición de las más de 4.000 personas que trabajan en la ONU, platos como el zancarrón de gallo de corral en pepitoria, zarzuela de pescado y marisco, terrina de cordero al estilo castellano, paella valenciana o lomo de ternera a la riojana. Los delegados ante la ONU que utilizan el restaurante VIP han disfrutado de propuestas como el tradicional gazpacho andaluz con guarnición, ajoblanco malagueño, asadillo de pimientos con ventresca, escalivada catalana con anchoas o ensalada de perdiz escabechada para los entrantes. Como platos principales han degustado pollo campero al chilindrón, suquet de pescado y marisco al azafrán, fideuá de Gandía, etc.