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La campaña socialista se basa en el "miedo" y la "negación", afirma

Mas dice al PSC que es contradictorio negar que él sea el cambio y decir que CiU ha cambiado

Mas dice al PSC que es contradictorio negar que él sea el cambio y decir que CiU ha cambiado

El candidato cree que si no se da un pacto a la vasca entre el partido de Montilla y el PP no será por falta de ganas sino de posibilidades

miércoles 10 de noviembre de 2010, 14:52h

El presidente de CiU, Artur Mas, ha recordado al PSC que no se puede ir diciendo que él no representa ningún cambio -en alusión a la campaña socialista que tiene como lema 'Artur Mas de lo mismo'- y, a la vez, decir que la CiU actual no es como la de Pujol. "Supongo que quieren decir que no represento ningún cambio, pero después viene Felipe González y le avisan de que la CiU de ahora no tiene nada que ver con la de Pujol. ¿En qué quedamos?", ha preguntado en alusión tambiéna unas recientes declaraciones de Montilla.

El candidato convergente a presidir la Generalitat ha cargado este miércoles contra la campaña del PSC porque está basada en "el miedo y la negación", y ha admitido que le desconcierta la estrategia de los socialistas.

En un ciclo de conferencias de El Periódico, ha salido al paso de las últimos mensajes electorales de los socialistas catalanes -como el que destaca que no son ni independentistas ni de derechas- y de las declaraciones del presidente de la Generalitat, José Montilla, que comparó a Mas con el primer ministro británico, David Cameron.

"Como Cameron ha tomado decisiones complicadas, deben de querer explicar que vendrá el monstruo de Mas y que lo recortará todo", ha subrayado el candidato de CiU, quien también considera contradictorio que el PSC les acuse de querer la independencia y después de que pactarán con el PP.

El candidato de la federación nacionalista ha constatado que ambas cosas no pueden ir vinculadas, y también ha hecho referencia al lema de los socialistas 'Artur mas de lo mismo'. "Supongo que quieren decir que no represento ningún cambio, pero después viene Felipe González y le avisan de que la CiU de ahora no tiene nada que ver con la de Pujol. ¿En qué quedamos?", ha preguntado en alusión a unas recientes declaraciones de Montilla.

"La campaña del PSC está basada en generar miedo, en la negación y no en la afirmación. No son capaces de definirse cuando dicen que no son ni independentistas ni de derechas. Todo es una apelación al miedo", ha añadido Mas, quien opina que no es momento de estos mensajes, sino de alimentar la confianza de que Cataluña es capaz de salir adelante.

Además, ha dibujado tres posibles escenarios posibles tras las elecciones: la reedición del tripartito, un gobierno débil de CiU y un gobierno de una gran mayoría de la federación, aunque sin mayoría absoluta.

Aunque ha escenificado un cuarto, el del pacto a la vasca, Mas pronostica que no tiene posibilidades: "Difícilmente PSC y PP sumarán para gobernar. Lo descarto no porque los protagonistas no tuvieran algunas ganas, sino porque aritméticamente es imposible".

Pese a todo, ha abogado por un gobierno fuerte para evitar un tercer tripartito y afrontar con un único proyecto y liderazgo cohesionado el "momento delicado" de Cataluña.

Esto no se podrá hacer con todo el impulso necesario si la federación debe negociar un gobierno de coalición, según Mas, quien ha asegurado que un ejecutivo fuerte no es igual a un gobierno "aislado y egoísta", tras insistir en su disposición a alcanzar acuerdos puntuales sobre temas concretos con el resto de partidos.

Para Mas, esta dinámica permitiría que CiU no tuviera que renunciar a parte de su programa electoral y evitaría que "los que tienen un 8 o 10 por ciento de los votos acaben a marcando la agenda entera de un país en temas muy sensibles", como ha pasado, a su juicio, durante esta legislatura, en una clara referencia a ICV-EUiA.

Sin abandonar la gestión de los ecosocialistas, Mas ha sido especialmente crítico con la acción de la conselleria de Interior, liderada por Joan Saura. En concreto, les ha acusado de hacer "propaganda barata y partidista de los errores de la policía" con el debate que se abrió cuando se instalaron cámaras en las comisarías.

"Este no es el debate, sino el uso que se hace de lo que queda grabado en las cámaras y ponemos a la policía al pie de los caballos del desprestigio en el conjunto del país", ha añadido Mas, quien ha indicado que Interior debería haber amparado y defendido al cuerpo.

Con el catalán, mejor seducir que sancionar

También ha opinado sobre las multas lingüísticas, y ha querido aclarar que la Ley de Política Lingüística da libertad a los comerciantes para que rotulen en cualquier idioma, pero que, como mínimo, parte de la información la deben poner en catalán.

Pese a todo, Mas ha destacado que si es presidente de la Generalitat no pondrá el acento en el apartado sancionador y que él es partidario de la cultura de la seducción. "O el catalán es capaz de seducir o por muchas multas que pongamos no convenceremos", ha concluido.

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