Previamente el embajador venezolano en Santo Domingo, Alfredo Murga Rivas, había dicho a Efe que los venezolanos afectados eran cerca de una docena y que su estado era estable.
Según dijo a Efe un portavoz ministerial, los servicios de salud dominicanos diagnosticaron cólera a nueve personas -seis venezolanos y tres dominicanos- que asistieron a una boda el 22 de enero en una residencia privada en La Romana (este del país).
Hay otros 37 venezolanos asistentes a esa celebración a los que se les detectó la enfermedad ya de regresó a su país, y otros casos en España, México y Estados Unidos, según informó hoy en Caracas la ministra venezolana de Salud, Eugenia Sader.
Las langostas servidas en la boda procedían de las costas de la provincia dominicana de Pedernales, fronteriza con Haití, país donde una epidemia de cólera ha afectado desde mediados de octubre a unas 200.000 personas y ha causado la muerte de cerca de 4.000.
Un comunicado del Ministerio de salud Pública señala que se "han determinado fallas en la cadena de refrigeración" de las langostas, que "no estuvieron debidamente cocidas" en el momento de ser servidas en la fiesta, a la que asistieron más de 500 personas.
Entre los nueve contagiados atendidos en la República Dominicana figura el hijo de una señora que trabaja en la residencia donde tuvo lugar la celebración, quien llevó parte de los alimentos a su casa.
En la República Dominicana se han contabilizado hasta ahora 238 casos de cólera, uno de ellos mortal.
El ministro de Salud Pública dominicano, Bautista Rojas, indicó hoy que no hay indicios de otros casos de la enfermedad vinculados directamente con este episodio.
También señaló que las autoridades dominicanas mantienen contacto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y las autoridades venezolanas en torno a esta situación, que está "bajo estricto control", agregó.