Será recordado Luciano Pavarotti por José Carreras en China.

Será recordado Luciano Pavarotti por José Carreras en China.

Luciano Pavarotti, el tenor más popular de la segunda mitad del siglo XX por su voz amplia y, según los críticos, la más bella que ha existido en Italia en las últimas décadas, nació hace 72 años y este viernes será recordado por José Carreras durante un concierto en China. El tenor español ofrecerá el próximo el 12 de octubre un concierto en el Gran Teatro de Shanghai, también con la participación de Borsi, donde interpretará la canción "Passione", de Nicola Valente, que solía cantar con su amigo Pavarotti.

Este tema era interpretado por ambos tenores en sus conciertos, junto a Plácido Domingo, como "Los Tres Tenores", en su afán de popularizar la ópera. El tributo que le rendirá en Shanghai se sumará a los homenajes "públicos" e "íntimos" que Carreras le ha dedicado al tenor de Módena en todas sus actuaciones, tras su muerte en septiembre pasado. Pavarotti, conocido como el "Rey del Do Agudo", nació en Módena, Italia, el 12 de octubre de 1935. Su gusto por las artes fue apoyado e impulsado por su padre, quien fue un músico aficionado que formaba parte de un coro local. Luciano asistió a la "Scuola Magistrale", en donde después de graduarse impartió clases de primaria.

Las primeras experiencias del excelso cantante dentro del mundo de la música fueron en el coro del Teatro de la Comunna, en su ciudad natal, y en la Coral de Gioacchino Rossini. En 1955 comenzó sus estudios de canto con Arrigo Polo y posteriormente se trasladó a Mantua, donde tomó clases con el profesor Ettore Campogalliani. Su talento y dotes artísticas permitieron que en 1961 ganara el "Concurso Internazionale de Opera", certamen en el que ejecutó por primera vez de manera profesional una ópera completa.

El 29 de abril de ese mismo año debutó en "La bohéme", de Verdi, ópera que fue presentada en el Teatro Municipal de Reggio Emilia, y cuyo rol de "Rodolfo" le abrió las puertas a su más importante reto, que era presentarse en el Teatro Massimo de Palermo. Sigue Será recordado Luciano. dos. Palermo En Dublín encarnó al "Duque de Mantua", de "Rigoletto", obra con la que llamó la atención del director australiano Richard Bonynge y de su célebre mujer, la soprano Joan Sutherland, quienes lo contrataron para una larga gira que supuso el despegue internacional del tenor. En 1965 debutó en Estados Unidos junto a la soprano Sutherland, en una producción de Lucia di Lammermoor.

Esta obra marcó el inicio de lo que sería su historia conjunta, pues sus participaciones en "La bohéme", representada en Italia y en la Unión Americana conquistaron el corazón de cientos de admiradores en todo el mundo. Un año después interpretó a "Tonio", en "La Fille du Régiment", y se consolidó a nivel internacional al participar en 1966 en el Convent Garden, en Londres, donde le concedieron el título de "Rey de la Octava Do". En 1968 se consagró con "Rodolfo de Bohéme" en el Metropolitan Opera House, de Nueva York, pues, al decir de los críticos, su actuación escénica es también muy buena, sobre todo en los papeles cómicos, en los que ha resultado especialmente convincente. S

Su repertorio se amplió a medida que fue madurando, y a los grandes papeles para tenor lírico agregó otros más dramáticos, como el "Radamés" de "Aída", el "príncipe Calaf" de "Turandot" o "Mauricio" y "Ernani". En 1992 encarnó a "Otello", el rol más importante y difícil de su carrera, durante la cual ha deleitado a millones de personas con su voz en diversas óperas. El ascenso impresionante de Luciano Pavarotti como cantante lírico ha hecho que sea el más nombrado desde el tenor italiano Enrico Caruso (1873-1921). Sus grabaciones incluyen colecciones de arias y recitales, un concierto en vivo en el Carnegie Hall, antologías de canciones napolitanas e italianas y varias interpretaciones en vivo junto a cantantes de la talla de Sting, Bryan Adams y Bono (U2), las cuales han hecho que Pavarotti sea un ídolo admirado por diversas generaciones.

Las impresionantes ventas de su discografía en los últimos 20 años hicieron que se convirtiera en el tenor más popular de la segunda mitad del siglo XX, según sus biógrafos. Las actuaciones junto a sus amigos José Carreras y Plácido Domingo le han permitido recorrer el mundo, estando entre sus más exitosos conciertos el de Roma, Italia (1991), y el de Los Angeles, California (1994). Sigue Será recordado Luciano. tres. (1994) En octubre de 2003 se presentó en México en el concierto "Pavarotti Sin Fronteras", en el desierto de Mexicali, Baja California, y los recursos se destinaron para apoyar a personas que requieren trasplantes de córnea y riñón, así como tratamientos a niños con cáncer.

El espectáculo, que ha sido catalogado como un acontecimiento de trascendencia nacional e internacional, se realizó en medio del desierto, donde la única escenografía fue la Luna. Por su trayectoria y aportación a la cultura de su país natal, el tenor recibió el premio Excelencia del Ministerio de Cultura de Italia. En esa ocasión, declaró que "se trataba de un galardón que celebra la magia de una vida dedicada al arte". En tanto, sus actuaciones junto a sus amigos José Carreras y Plácido Domingo le permitieron recorrer el mundo, como lo hizo hasta cuando anunció su retiro de los escenarios.

La última aparición en público se registró en la ceremonia de apertura de las Olimpiadas de Invierno, en Turín, en febrero de 2006, acontecimiento en el que cantó "Nessun Dorma". Ese mismo año, en Nueva York, le fue detectado un cáncer de páncreas del cual fue operado, pero esta intervención fue minando su vida. El tenor italiano vivía alejado de los escenarios en su villa de Módena, al norte de Italia, donde falleció el pasado 6 de septiembre, dejando pendiente un concurso internacional de canto con su nombre, el cual se celebraría en 2008 en el teatro de la Scala de Milán. Más de 50 mil personas se congregaron en la plaza de Módena para rendirle homenaje al "Gran Luciano" con un prolongado aplauso, mientras 10 aviones de la patrulla acrobática de la aviación italiana efectuaron un doble vuelo sobre esa ciudad, dejando a su paso estelas con los colores de la bandera italiana rojo, blanco y verde.

Sus restos descansan en el panteón de su querida Módena, le sobreviven su segunda esposa Nicoletta Mantovani y la hija de ambos, Alice, de cuatro años, así como tres hijas de su primer matrimonio.