Las ayudas al vehículo eléctrico son un estímulo para incentivar la demanda

El Consejo de Ministros aprobó en su reunión del pasado 26 de abril las ayudas para la adquisición de coches eléctricos en 2013, que contarán con un presupuesto de 10 millones de euros, la misma cantidad que se destinó el año pasado.
El ministro de Industria subrayó que estas ayudas se aprueban en una situación evidente de restricciones presupuestarias, pero con el objetivo de apoyar la venta de los vehículos eléctricos y el desarrollo de la movilidad sostenible y la tecnología de este tipo de coches.
La cuantía de las ayudas varía según las características del vehículo y de su autonomía. Los turismos recibirán 5.500 euros si tienen más de 90 kilómetros de autonomía, 3.500 euros los que tengan entre 40 y 90 kilómetros, y 2.500 euros si tienen una autonomía entre 15 y 40 kilómetros.
También tendrán subvención los cuadriciclos ligeros (1.800 euros), los pesados (2.200), los autobuses, autrocares y furgones (M2) (8.000), llegando hasta los 20.000 euros en el caso de los autobuses y autocares (M3).
Para Ganvam, la era de los eléctricos todavía está por llegar, a juzgar por las últimas cifras con sólo 70 unidades matriculadas en el primer trimestre (-39%), lo que supone sólo el 0,1% del objetivo de 70.000 vehículos fijados para este año por la Estrategia Integral para el Impulso del Vehículo Eléctrico.
Se quedan fuera las motos
Ganvam llamentó que las motos impulsadas con esta tecnología hayan quedado excluidas de las ayudas, cuando hoy por hoy representan la verdadera solución de movilidad eléctrica por su precio más asequible, bajo consumo, facilidad de recarga y duración de las baterías, llegando a triplicar la compra de coches de este tipo. Durante el primer trimestre se vendieron 203 motos eléctricas.
Según el presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, "el coche eléctrico es la movilidad del futuro y alcanzará una cuota de mercado algo más representativa dentro de cinco o seis años, cuando consiga salvar obstáculos como su limitada autonomía o la falta de puntos de recarga, que están frenando su penetración en el parque, a pesar de representar la opción de movilidad más barata en el entorno urbano".