www.diariocritico.com
Recupero, recuperavi, recuperatum

Recupero, recuperavi, recuperatum

martes 22 de julio de 2014, 13:35h
No es necesario acudir al DRAE para entender que Recuperar es volver a tener lo que se tuvo y se perdió.
 
El gobierno plutócrata que padecemos, apoyado por sus elitistas coequipiers de la más rancia Europa, ha lanzado sus campanas al vuelo y habla de recuperación, de lo pasmado que está el mundo con nuestro manejo de la crisis, de la bonanza con longaniza que se aproxima, del reverencial aplauso de los mercados que ya pueden legislar en España sin pasar por el parlamento (véase China, 25% de nuestra deuda en su poder y varias leyes a medida como la de la Justicia Internacional a Medida o el asunto Gao Ping, que al final saldrá a la luz)  y en cualquier momento aparecerá el presidente Rajoy a decirnos queshpañavabién y comodioshmanda.
 
Dante -que alguien le diga al presidente lumbrera que fue un poeta no un jugador de fumbo- situó a Pluto, dios del dinero, en el tercer Infierno presentándolo más como un demonio lobuno que como una deidad. Los mandamases de esta Europa de los Pantalones Bajados se han convertido en sus fieles servidores, faustos que cambian la inmortalidad y la grandeza por un plato de lentejas con purpurina dorada con la que apañar bien su ya bien cubierta jubilación.
 
Hablar de recuperación cuando hay 2.5 millones de niños en España que no pueden alimentarse adecuadamente; cuando el 18.5% de las familias encuentra el fin de mes en el día 20; cuando los tiempos de espera en la seguridad social se han incrementado en un 215% en los últimos tres años; cuando ha aparecido la figura oximorónica del trabajador que no puede mantenerse con su sueldo; cuando el jefe de la patronal madrileña es un fracaso como empresario y un sinvergüenza con coche oficial en el resto de las facetas de su vida; cuando uno de los mayores muñidores de la crisis en España y en el mundo (Rodrigo Rato) sigue acumulando puestazos, sueldazos e impunidades; cuando el ministro de la economía, venido de la cúpula mundial de JP Morgan, está solamente pensando en el próximo euro-cargazo con ingresos mensuales de 49.000 euros; cuando los sindicatos hieden a putrefacción; cuando el principal partido de la oposición está jugando al lampedusismo cambiando caretos arrugados por caretos liftados, mala imitación de Dorian Gray, y sin meter mano en los EREmitas del EREbo andaluz que reclaman poder andar con la cabeza EREcta; hablar de recuperación con estas premisas, digo, es de sinvergüenzas.
 
Luego nos distraen con fuegos de artificio tan pueriles que sonrojan: el desencuentro Mas/Rajoy -¿Qué desencuentro? Admito apuestas: digo qué todo se disolverá como un azucarillo en los próximos sesenta días-; o las chorradas que ecce presidente es capaz de pronunciar en los más "arriesgados" escenarios sobre Israel/Palestina, Putin/Ukrania, Juncker/PSOE, y menos mal que la selección española mostró la verdadera putrefacción socioendémica que vivimos en el país porque si no, a todas las majaderías estivales del Espectro de Moncloa habría que sumar sus brillantes análisis fumboleros.
 
Se acaba julio. Mérida sigue siendo la gran esperanza española para poder comprender este mundo disparatado a través de lo que escribieran Homero o Sófocles o Eurípides -porfa, el mismo de antes, que vuelva a avisar al presidente que tampoco en este caso se trata de jugadores de fumbo en pleno "mercado de verano" no sea que la cague en vivo, en directo e interconectado-: a poco que te sea posible, lector, déjate caer alguna noche por aquellas piedras hermosas, llenas de vibraciones bimilenarias, y atiende a lo que la sabiduría humana de 26 siglos todavía nos tiene que enseñar. Con un poco de suerte volverás a recuperar la fe en la humanidad y, como yo, a comprender que no hay mal que cien años dure ni legislaturas de más de cuatro años.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
7 comentarios