La era de la información nos sumerge en un caos de datos, dispositivos tecnológicos y cortoplacismo que genera cierto estrés y convulsión en nuestras agendas. La ausencia de barreras espacio temporales han sido eliminadas por la vertebración que las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación) han dado a nuestra sociedad, nos empuja a la conectividad permanente, siendo esto una obligación al tiempo que un instrumento estratégico para hacer de nuestra vida cotidiana algo mas cómodo. Comprar por internet, hacer gestiones, incluso visitar ciudades o museos a través de la red. Todo ello nos facilita nuestro día a día , y entonces ¿por qué no íbamos a recurrir a la red para facilitar nuestra necesidad de relaciones y diversión esporádicas. Para ello son muchos los portales de contactos por internet que ofrecen este servicio, pero no todos son iguales.
Aunque la red puede agilizarnos nuestra búsqueda de relaciones esporádicas, tenemos que tener en cuenta que la identidad se difumina y los datos personales pueden correr cierto riesgo al ser introducidos en plataformas no seguras. Por ello hemos de asegurarnos la seguridad y la calidad de los servicios a los que recurramos. Practicidad y eficacia no sirven para dotar de calidad a estos portales, necesitan garantizarnos la seguridad, la discreción y la calidad a nivel transversal de todos los servicios, una seriedad que no esta al alcance de cualquier web en la red.
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