La piloto de rallys española Laia Sanz ha comentado este miércoles que llega "más preparada que nunca" para el Rally Dakar 2016, que supondrá su sexta participación consecutiva, y ha añadido que ha tenido la moto a tiempo para entrenar y que "el trabajo bien hecho" le ha permitido estar "muy adaptada" para la competición, la primera como piloto oficial de KTM.
"Llego más preparada que nunca. Es el año que llevo más quilómetros haciendo Rallys, he tenido la moto a tiempo y estoy muy buen adaptada. El hecho de estar en el enduro me lo ha puesto todo más fácil, y ahora el trabajo está bien hecho. Me voy tranquila pensando que lo haremos lo bien.", declaró en rueda de prensa.
La catalana apuntó que las expectativas actualmente son elevadas. "Todo el mundo se espera mucho de mí, y veremos qué pasa. Todos piden mucho pero este año hay más nivel que nunca. Cada equipo oficial tiene muchos pilotos completos, hay unos 20 pilotos para ganar etapas, y será un rally donde habrá mucha auto-eliminación", remarcó.
"No será nada fácil, pero soy ambiciosa y realista a la vez. Después de un año tan bueno se tiene que intentar estar cerca. Estoy preparada. La mejor recompensa es llegar al final después de 15 días, y sobre todo si te ha ido bien la carrera", comentó sobre la posible mejoría de la novena marca del año pasado, la mejor de una mujer en la historia.
Sanz remarcó la dificultad de acabar un Dakar. "No es fácil acabar cinco Dakars, pocos pilotos lo han hecho. Tendremos que intentar acabar este sexto. En la segunda semana la experiencia contará mucho, ser conservador y hacer una buena estrategia será fundamental y creo que al ser mi sexta participación puede ayudarme", comentó.
"Tendré que tomarme con calma la primera semana y no agobiarme con los resultados de las primeras etapas y llegar en forma a la segunda semana que es donde se decidirá la carrera", apuntó. "No hago muchos errores en navegación. Este será mi punto fuerte y será lo que tendré que aprovechar la segunda semana. Mi punto fuerte no es la velocidad", se sinceró.
Este año habrá dos etapas más en altura, con la dificultad que conlleva. "En Bolivia hay dos días más de competición y tendrán que haber encontrado caminos nuevos. Este año tenemos más días en altura y esto es complicado. También parece que habrá más arena que el año pasado. Es un Dakar que habrá que dosificarse muy bien", añadió.
La presión puede ser un valor añadido en esta carrera, y Sanz recalcó que no tiene que estar "preocupada" en ese sentido. "Después del año pasado ha habido cambio en la manera de mirarme. Después de cuatro etapas los pilotos preguntaban que había hecho yo. Seguramente este curso habrá más presión pero no tengo que estar preocupada con esto, y como he dicho hay que hacer una primera semana tranquila y luego ya se verá", explicó.
"Una de las cosas que más me gustaba de KTM es que yo podía hacer mi carrera. Ahora que no está Marc queda todo mucho más abierto. Todo el mundo tiene que hacer su carrera y es una cosa muy buena del equipo que todos tenemos las mismas condiciones y tenemos que hacer nuestra carrera, y esto se agradece", comentó.
Por último lamentó la retirada de Marc Coma y el no haber competido con él. "Me hubiese gustado mucho compartir carrera con Marc Coma y así ver su manera de trabajar. En el equipo hay pilotos con mucha experiencia de los cuales tengo mucho que aprender también", señaló.
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