En rueda de prensa, el Jefe de Estado dijo que la decisión fue asumida para dar al pueblo la palabra definitiva si está con el proceso de cambio o prefiere la vigencia del sistema neoliberal.
En ese marco, es que el Poder Ejecutivo enviará este jueves al Congreso Nacional el proyecto de referéndum revocatorio para que sea aprobado y la Corte Nacional Electoral (CNE) convoque a los bolivianos a las urnas.
La decisión responde al pedido de los prefectos y cívicos de la denominada "media luna", más Cochabamba y Sucre, que exigen un referéndum de revocatorio de mandato del Presidente de la República por considerar que se "está vulnerando la democracia y la Constitución Política del Estado".
Ante las movilizaciones sociales que encabezan los prefectos opositores en contra del oficialismo, el presidente Evo Morales desafió anoche y, por segunda vez, a éstos a someterse al referéndum revocatorio para que la gente decida con su voto la continuidad de las autoridades, además de la visión de país que representan.
“Les propongo a los prefectos conservadores y no conservadores, a los nueve prefectos del país someternos juntos a un referéndum revocatorio, que el pueblo diga si están con el cambio o no están con el cambio, que el pueblo diga si están con el modelo neoliberal, con la privatización, con las subastas de nuestros recursos naturales, de nuestras empresas o no. No hay por qué tenerle miedo al pueblo”, afirmó anoche el Mandatario en un mensaje a la nación.
La reacción de los opositores no fue unánime, puesto que algunos aceptaron y otros rechazaron el planteamiento.
Por ejemplo, el prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, dijo que acepta el reto siempre y cuando el Presidente deje sin efecto el recorte del IDH a las prefecturas para pagar la renta Dignidad y la aprobación en grande del texto constitucional.
Ésta es la segunda vez que Morales reta a las autoridades departamentales a someterse al referéndum revocatorio. La primera vez fue el 12 de enero, un día después de que en Cochabamba se enfrentaran seguidores del Gobierno y del prefecto Manfred Reyes Villa, con un saldo de dos muertos.
El proyecto de ley de referéndum revocatorio del mandato popular presentado por el Ejecutivo el 19 de enero hasta ahora no fue analizado en el Congreso.
Anoche, Morales anunció que “mañana (por hoy) enviaré un proyecto de ley al Congreso Nacional para que rápidamente convoquen a este referéndum revocatorio, para que este grupo de adversarios políticos, adversarios ideológicos, adversarios programáticos no estén usando al pueblo para buscar muertos”.
Los prefectos de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Cochabamba convocaron a la resistencia civil a las medidas planteadas por el oficialismo, luego que éste aprobó en grande el texto constitucional en un recinto militar, sin la presencia de la oposición y en medio de una convulsión social en Sucre que terminó con tres personas muertas.
Además, en el Congreso Nacional, el MAS aprobó sin la oposición y con un cerco de sectores sociales un recorte al presupuesto prefectural para pagar una renta vitalicia mensual a los ancianos.
Los prefectos que rechazaron esas medidas además de convocar a huelgas de hambre iniciaron una campaña de denuncia internacional en contra del oficialismo por “vulnerar preceptos de la democracia en la aprobación del texto constitucional”.
Ante esas acciones, Morales dijo que “nos acusan internacionalmente que nosotros somos autoritarios, no se trata de ir a quejarse a nivel internacional, aquí se trata de someternos al pueblo, someternos democráticamente al pensamiento, a la conciencia del pueblo”.
El Jefe de Estado se comprometió a aceptar los resultados del referéndum aunque éstos le sean desfavorables. “Si el pueblo dice se va Evo, no tengo ningún problema, soy el más demócrata, el pueblo dirá quiénes se van y quiénes se quedan para garantizar este proceso de cambio”, acotó Morales.
El oficialismo controla las prefecturas de Oruro y Potosí, el resto son de partidos opositores al Gobierno. Según la propuesta de Morales, todos los prefectos se someterían a un referéndum.
El Presidente considera que la oposición usó tres pretextos para movilizar a la gente en su contra. El primero, según el, fue la autonomía; el segundo, los dos tercios de votos en la Constituyente; y el tercero, la demanda de capitalidad. Según dijo, las demandas fueron atendidas, pero pese a eso los opositores generaron convulsión en el país.
“Les propongo a los prefectos conservadores y no conservadores someternos juntos a un referéndum revocatorio. Que el pueblo decida”.
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