En concreto ha sido el juez Marcos Ramón Porcar, del Juzgado de Instrucción 1 de Majadahonda (Madrid) el que da a Villar por investigado -la antigua condición de imputado- por cometer presuntamente un delito de prevaricación según el artículo 404 del Código Penal. Debido a que fijó la fecha de las elecciones a la presidencia de la Federación en fecha que incumple la normativa obligatoria, que señala que las Federaciones de deportes que no se hayan clasificado para los Juegos Olímpicos, cual acontece con el fútbol, han de celebrar elecciones en los primeros cuatro meses de cada año olímpico.
Por tanto las elecciones a la RFEF debían haberse celebrado en el primer cuatrimestre del año, algo que no ha sucedido. Las elecciones aún no tienen fecha establecida y no se celebrarían antes del último cuatrimestre de 2016. Esta investigación judicial se debe a la querella contra Villar -que lleva 28 años al frente de la Federación- presentada, en este Juzgadoi, por Miguel Galán, que tien eintención de presientarse a esas elecciones.
No sólo en el proceso se incluye a Villar, ya que también deberán declar, no como imputados, sino como testigos, el presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, su homólogo en la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, e incluso el secretario eneral de la RFEF, Jorge Pérez.