Aguirre y Gallardón vuelven a chocar por el eje Prado-Recoletos

Ruiz-Gallardón formuló este viernes el compromiso a la presidenta regional, tras firmar con ella un convenio para promover el uso de gas licuado del petróleo en los taxis de Madrid, en el transcurso de una conversación privada en la que también estaba presente el consejero de Transportes, Manuel Lamela.

Según fuentes de la Comunidad, en ese encuentro Aguirre mostró "su preocupación" al alcalde "por las consecuencias que tendrá en la movilidad" de la ciudad el último proyecto para la reforma del Eje Prado-Recoletos, que ha sido consensuado por el Ayuntamiento de Madrid y la Fundación Thyssen pero al que la Comunidad debe dar luz derde.

Este proyecto, que reduce de cinco a tres los carriles de tráfico que habrá junto al Museo Thyssen, plantea "dudas" a la presidenta en cuanto a la repercusión que una actuación como esa podría tener en el tráfico que discurre por un eje vital para las conexiones norte-sur de la capital.

Sin salida clara
Como ya informó este jueves Madridiario.es, la Comunidad se reserva el veto al proyecto de Gallardón en caso de que no cumpla los requisitos medioambientales y de movilidad necesarios, ya que el ejecutivo regional debe emitir el informe favorable.

Además, el ejecutivo presidido por Aguirre no ve clara la solución de los carriles a la altura del Museo Thyssen y no entiende por qué se ha descartado la solución del túnel en el eje Prado-Recoletos para solucionar los problemas circulatorios.

En este sentido la Consejería de Transportes anunció también este viernes que analizará "con detenimiento" y enviará "sus conclusiones" acerca del estudio de movilidad del Eje Prado-Recoletos que el Ayuntamiento se ha comprometido a enviarle.

Opinar "solo sobre el patrimonio"
Por su parte, el alcalde de Madrid afirmó que la Comunidad debe centrar su análisis en su afecta al patrimonio histórico-artístico. "La Comunidad lo que tiene que hacer el pronunciarse sobre si el proyecto que nosotros presentamos afecta o no al patrimonio histórico- artístico, porque al ser Bien de Interés Cultural (BIC) lo que significa no es que (el Ejecutivo regional) tenga las competencias, que son naturalmente del Ayuntamiento, pero sí tiene la obligación de evitar cualquier afección que dañase el patrimonio histórico-artístico", indicó en declaraciones a Telecinco.

"Esa es la razón por la que no se hace un túnel, porque un túnel sí que afectaría al patrimonio histórico-artístico, aparte de que afectaría naturalmente al arbolado", subrayó Gallardón en referencia a la propuesta lanzada por la Comunidad de Madrid.

No obstante, el regidor subrayó que "a estas alturas", la baronesa Carmen Thyssen, no se ha pronunciado todavía sobre el acuerdo alcanzado entre el Patronato de la Fundación Thyssen, el Ministerio de Cultura y el propio Consistorio. "Ojalá la baronesa se sume al acuerdo que hemos alcanzado con el Patronato. Estamos esperando", dijo.

Preguntado por la amenaza de la baronesa de llevarse a otro lugar el museo, el alcalde de Madrid minimizó la importancia de estas amenazas. "El museo y el contenido es de todos los ciudadanos españoles, y por lo tanto público, y el único que puede decidir es el titular, y el titular es el Ministerio de Cultura del Gobierno de España", manifestó.

Lucas pide consenso
El portavoz municipal del PSOE en el Ayuntamiento, David Lucas, reivindicó en rueda de prensa que el proyecto debería "partir del consenso", por lo que agradeció el ejemplo de mediación de una institución como el Ministerio de Cultura, aunque fuera para resolver un tema puntual como es la afectación del Msueo Thyssen.

Lucas transmitió que "el proyecto en el que piensa el PSOE", en lugar del propuesto por Gallardón, "pretende reducir el tránsito de tráfico, potenciar la masa arbórea y garantizar la potenciación del eje como zona cultural".